/ martes 26 de noviembre de 2019

Continúan las deficiencias en el sector salud

Cada vez, es más complicada la situación precaria del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), no sólo en la calidad del servicio que desde hace décadas; nos queda mucho a deber a los mexicanos. Ahora el abastecimiento de medicamentos, es cada vez más pobre, como muestra, hace meses no hay insulina y se carece de especialista.

Como muestra del poco desinterés en esta problemática, el Gobierno Federal, ha dejado de invertir 5 mil 938 millones de pesos en el sector salud; esto hasta el mes de septiembre. Al igual, también se han despedido a 10 mil médicos, enfermeros y técnicos especializados, y recortado apoyos a los médicos residentes, estudiantes de medicina y enfermería, así como el 100 % del apoyo a alumnos de odontología y áreas afines.

Se supone que la salud y la educación deben de ser prioridad en el Gobierno, independientemente de su bandera política. Con la desaparición del seguro popular, ha disminuido las atenciones en padecimientos como cáncer.

Ahora la propuesta del Titular del IMSS, Zoe Robledo, es que en breve habrá consultas médicas también los fines de semana. Esta medida es aplaudible, pero si tomamos en cuenta que no hay tratamientos para los pacientes y han disminuido el número de especialistas. Así que la revisión, queda en mera visita.

Enfermedades como cáncer, diabetes e hipertensión, los costos en su tratamiento son inalcanzables económicamente para la clase obrera. Y bueno, otra de las deudas que tienen en este rubro con los juarenses, el hospital de cancerología que, desde el Gobierno de Cesar Duarte, nos han dicho que pronto lo tendremos en la ciudad.

En este nuevo Gobierno Federal, como bien sabemos Instituto Nacional de la Salud, reemplaza al Seguro Popular. ¿No sería más sencillo, que se trabajara y perfeccionara lo ya existente? Además, Zoe Robledo comenta que se abrirán 5 mil plazas para doctores. A pesar de esto, es un déficit, si tomamos en cuenta el reciente despido de miles de plazas.

Ojalá y en acciones, más que en palabras se refleje el interés por cubrir las necesidades del sector salud. Esperemos que más allá de los gastos de desfile, navidad y otras festividades, halla inversiones en este rubro. Y no veamos casos en los que los pacientes tienen que esperar meses para iniciar con el tratamiento. ¿Cuántas promesas de campana faltan, para que veamos resultados reales?




Cada vez, es más complicada la situación precaria del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), no sólo en la calidad del servicio que desde hace décadas; nos queda mucho a deber a los mexicanos. Ahora el abastecimiento de medicamentos, es cada vez más pobre, como muestra, hace meses no hay insulina y se carece de especialista.

Como muestra del poco desinterés en esta problemática, el Gobierno Federal, ha dejado de invertir 5 mil 938 millones de pesos en el sector salud; esto hasta el mes de septiembre. Al igual, también se han despedido a 10 mil médicos, enfermeros y técnicos especializados, y recortado apoyos a los médicos residentes, estudiantes de medicina y enfermería, así como el 100 % del apoyo a alumnos de odontología y áreas afines.

Se supone que la salud y la educación deben de ser prioridad en el Gobierno, independientemente de su bandera política. Con la desaparición del seguro popular, ha disminuido las atenciones en padecimientos como cáncer.

Ahora la propuesta del Titular del IMSS, Zoe Robledo, es que en breve habrá consultas médicas también los fines de semana. Esta medida es aplaudible, pero si tomamos en cuenta que no hay tratamientos para los pacientes y han disminuido el número de especialistas. Así que la revisión, queda en mera visita.

Enfermedades como cáncer, diabetes e hipertensión, los costos en su tratamiento son inalcanzables económicamente para la clase obrera. Y bueno, otra de las deudas que tienen en este rubro con los juarenses, el hospital de cancerología que, desde el Gobierno de Cesar Duarte, nos han dicho que pronto lo tendremos en la ciudad.

En este nuevo Gobierno Federal, como bien sabemos Instituto Nacional de la Salud, reemplaza al Seguro Popular. ¿No sería más sencillo, que se trabajara y perfeccionara lo ya existente? Además, Zoe Robledo comenta que se abrirán 5 mil plazas para doctores. A pesar de esto, es un déficit, si tomamos en cuenta el reciente despido de miles de plazas.

Ojalá y en acciones, más que en palabras se refleje el interés por cubrir las necesidades del sector salud. Esperemos que más allá de los gastos de desfile, navidad y otras festividades, halla inversiones en este rubro. Y no veamos casos en los que los pacientes tienen que esperar meses para iniciar con el tratamiento. ¿Cuántas promesas de campana faltan, para que veamos resultados reales?