/ sábado 16 de enero de 2021

Educación para erradicar a la ignorancia

Sabemos que la cultura mexicana del S XXI, es resultado de guerras y crisis ocurridas en el siglo pasado, además de la pobreza que se muestra como un factor inherente a la condición económica del país.

Por lo tanto, el machismo, el clasismo, el racismo y los resentimientos sociales, continúan arraigados en la población.

Otro factor que impacta, son las diferencias socioeconómicas y étnicas que prevalecen en el país, porque no es lo mismo educar a un niño de Polanco en la Cd de México, que a un niño de la selva Lacandona.

Y no podemos negar que nuestra cultura, está estrechamente relacionada con las creencias religiosas.

Desde luego que no es fácil cambiar, y por todos es conocido, que la única forma de salir de la ignorancia; se llama […educación…]

Podría ser que este tópico, ya ha sido revisado y mas que analizado; sin embargo, llama la atención que desde hace algunos años, el gran peligro que enfrenta nuestro país, no es la corrupción, sino la ignorancia de la casi totalidad de nuestra clase política, entre gobernantes, legisladores y funcionarios que se regocijan en la ignorancia ante sus desatinos y torpezas.

Cebe preguntar ¿Qué no se darán cuenta?

No es posible que se desconozcan las transformaciones registradas en el mundo de estos últimos decenios, donde se ha producido un salto cualitativo en la globalización, con el referente de dos “marcos” muy bien diferenciados entre el conocimiento a través de la educación y la ignorancia.

Así que gobernar como si nada hubiese cambiado, es peligroso por exhibir la ignorancia, la incapacidad y la irresponsabilidad, para analizar los problemas que tenemos y entender sus causas.

Nuestro país, literalmente se ahoga en la ignorancia de muchos políticos que ejercen el poder, recordemos que Aristóteles en el S III a.C., mencionaba que “En la política, resulta complicado ofrecer datos concluyentes sobre quien es un buen político o quien es un político de calidad, y cuáles pueden ser sus atributos”.

Lo que bien es cierto, es que desde el nivel básico debemos disciplinarnos para filosofar, esto nos ayudará a desenmascarar aquellas mentiras que nos venden como verdades aquellos que se dicen “políticos”.

De esta forma habrá un interés genuino por adquirir información y analizarla, sobre todo por los tiempos electorales que se avecinan, para identificar errores, vicios y manías rimbombantes y enajenantes de los futuros políticos que ya se “ven” recibiendo su salario del famoso y codiciado “erario”

Sabemos que si la sociedad se encuentra educada podrá ser más libre, responsable y consciente de sus actos, además de adquirir un pensamiento crítico.

Esta responsabilidad desde luego que recae en los padres de familia y los profesores, que son los proveedores y controladores de la información.

Por lo tanto, puede ser concebida como un sistema de retroalimentación y evolución, en el cual se llenan los huecos argumentales mediante el análisis, además, es importante mencionar que no todas las personas tienen los mismos intereses o destrezas; pero cada una de ellas contribuye significativamente al progreso como especie humana.

Las ideas podrán ser discriminadas, desde luego que sí; sin embargo pueden ser dialogadas, contrastadas, evaluadas y promovidas en aras de mejorar individual y socialmente.

No podemos darnos el lujo de seguir siendo ignorantes, es necesario que la información adquirida, se ponga a prueba para obtener conclusiones que nos ayudarán a mejorar a la sociedad y asegurar nuestra supervivencia.

No se trata de que todos tengan que ser científicos o filósofos, sino que se debe de aceptar, que en torno a un tema en particular haya evidencia e investigación.

Debemos tener nuevas opciones de pensamiento, manteniendo un criterio para tomar decisiones que sean favorables para la sociedad.

Probablemente todo esto suena utópico, pero solo con educación, podremos alcanzar un segundo renacimiento.

¿Hasta cuando seguiremos tapándonos los oídos si es que queremos sobrevivir, frente a esta oleada de políticos que están inmersos en la ignorancia?

Porque la política, es un asunto demasiado serio para confiárselo a los políticos.

Tan solo son “oportunistas” para ver resueltos sus problemas y no los de la sociedad.

Martin Luther King mencionaba; “Nada en el mundo es más peligroso que la ignorancia sincera y la estupidez concienzuda”.


Sabemos que la cultura mexicana del S XXI, es resultado de guerras y crisis ocurridas en el siglo pasado, además de la pobreza que se muestra como un factor inherente a la condición económica del país.

Por lo tanto, el machismo, el clasismo, el racismo y los resentimientos sociales, continúan arraigados en la población.

Otro factor que impacta, son las diferencias socioeconómicas y étnicas que prevalecen en el país, porque no es lo mismo educar a un niño de Polanco en la Cd de México, que a un niño de la selva Lacandona.

Y no podemos negar que nuestra cultura, está estrechamente relacionada con las creencias religiosas.

Desde luego que no es fácil cambiar, y por todos es conocido, que la única forma de salir de la ignorancia; se llama […educación…]

Podría ser que este tópico, ya ha sido revisado y mas que analizado; sin embargo, llama la atención que desde hace algunos años, el gran peligro que enfrenta nuestro país, no es la corrupción, sino la ignorancia de la casi totalidad de nuestra clase política, entre gobernantes, legisladores y funcionarios que se regocijan en la ignorancia ante sus desatinos y torpezas.

Cebe preguntar ¿Qué no se darán cuenta?

No es posible que se desconozcan las transformaciones registradas en el mundo de estos últimos decenios, donde se ha producido un salto cualitativo en la globalización, con el referente de dos “marcos” muy bien diferenciados entre el conocimiento a través de la educación y la ignorancia.

Así que gobernar como si nada hubiese cambiado, es peligroso por exhibir la ignorancia, la incapacidad y la irresponsabilidad, para analizar los problemas que tenemos y entender sus causas.

Nuestro país, literalmente se ahoga en la ignorancia de muchos políticos que ejercen el poder, recordemos que Aristóteles en el S III a.C., mencionaba que “En la política, resulta complicado ofrecer datos concluyentes sobre quien es un buen político o quien es un político de calidad, y cuáles pueden ser sus atributos”.

Lo que bien es cierto, es que desde el nivel básico debemos disciplinarnos para filosofar, esto nos ayudará a desenmascarar aquellas mentiras que nos venden como verdades aquellos que se dicen “políticos”.

De esta forma habrá un interés genuino por adquirir información y analizarla, sobre todo por los tiempos electorales que se avecinan, para identificar errores, vicios y manías rimbombantes y enajenantes de los futuros políticos que ya se “ven” recibiendo su salario del famoso y codiciado “erario”

Sabemos que si la sociedad se encuentra educada podrá ser más libre, responsable y consciente de sus actos, además de adquirir un pensamiento crítico.

Esta responsabilidad desde luego que recae en los padres de familia y los profesores, que son los proveedores y controladores de la información.

Por lo tanto, puede ser concebida como un sistema de retroalimentación y evolución, en el cual se llenan los huecos argumentales mediante el análisis, además, es importante mencionar que no todas las personas tienen los mismos intereses o destrezas; pero cada una de ellas contribuye significativamente al progreso como especie humana.

Las ideas podrán ser discriminadas, desde luego que sí; sin embargo pueden ser dialogadas, contrastadas, evaluadas y promovidas en aras de mejorar individual y socialmente.

No podemos darnos el lujo de seguir siendo ignorantes, es necesario que la información adquirida, se ponga a prueba para obtener conclusiones que nos ayudarán a mejorar a la sociedad y asegurar nuestra supervivencia.

No se trata de que todos tengan que ser científicos o filósofos, sino que se debe de aceptar, que en torno a un tema en particular haya evidencia e investigación.

Debemos tener nuevas opciones de pensamiento, manteniendo un criterio para tomar decisiones que sean favorables para la sociedad.

Probablemente todo esto suena utópico, pero solo con educación, podremos alcanzar un segundo renacimiento.

¿Hasta cuando seguiremos tapándonos los oídos si es que queremos sobrevivir, frente a esta oleada de políticos que están inmersos en la ignorancia?

Porque la política, es un asunto demasiado serio para confiárselo a los políticos.

Tan solo son “oportunistas” para ver resueltos sus problemas y no los de la sociedad.

Martin Luther King mencionaba; “Nada en el mundo es más peligroso que la ignorancia sincera y la estupidez concienzuda”.