/ miércoles 11 de mayo de 2022

Estamos perdiendo por default

En su videocolumna de opinión, Joaquín López-Dóriga espetó su molestia con los partidos de oposición porque no han logrado construir un candidato rumbo al 2024: “No tiene un solo líder capaz de competir”. Esta polémica declaración se volvió viral y generó muchos comentarios a favor y en contra.

Somos una mayoría, los mexicanos que estamos preocupados por el rumbo del país, pero no hemos logrado transformarla en un proyecto nacional sólido y competitivo que nos articule a todos los que pensamos que el país no va por buen camino.

Somos la mayoría de la población los que reconocemos la inseguridad como el principal problema por la violencia, los feminicidios, y la presencia creciente del crimen organizado. En un segundo lugar tenemos el tema de la inflación y la falta de inversión que ralentizan el crecimiento económico y empobrecen a la población más vulnerable.

Es la gran paradoja: la alta aprobación del presidente y el amplio margen que Morena mantiene en las preferencias electorales rumbo al 2024 y el fuerte aumento de entidades que gana, a pesar de la falta de resultados y de cumplimiento de las promesas de campaña.

Por eso nos caló tanto a quienes no queremos que el país continúe por el mismo rumbo, que a estas alturas la oposición no tuviera un líder capaz de ganar en el 24. Flota una angustia de futuro ante una oposición que no ha logrado consolidar suficientemente su propuesta.

La 4T, el Foro de Sao Paulo, el Grupo Puebla representan proyectos estructurados, para impulsar una agenda ideológica y política concreta y disciplinada aprovechando el ambiente crispado por la desigualdad, los privilegios y la concentración de poder en unos cuantos.

No solo falta encontrar a un candidato. Falta un proyecto. Una propuesta social y democrática que contraste con el populismo autoritario que ha fincado el presidente Andrés Manuel. Una propuesta ciudadana, plural, basada en los derechos humanos, la defensa de las instituciones y de la libertad de las personas. Una propuesta que logre proyectar a México a la economía del conocimiento, de la innovación, de las políticas ecológicas sustentables con gobernanza, transparencia y rendición de cuentas. El desarrollo social que desarrolle capacidades y amplie oportunidades; no la visión asistencial y clientelar de morena.

Debemos construir la mayor unidad posible de todos los que estamos preocupados y transmitirles a los partidos que deben ver por encima de sus proyectos particulares.

No tendremos ninguna posibilidad de avanzar mientras no logremos cambiar la percepción generalizada que recoge la encuesta publicada por el Grupo Reforma: que Morena es el partido que defiende a los pobres, maneja mejor los programas sociales y se preocupa por la gente; que el PRI es el partido qu le ha hecho más daño al país y roba más cuando gobierna; de que el PAN está desdibujado y de que MC quiere deslindarse para hacer la jugada individual.

No hay tiempo que perder. La sociedad está demandando una alternativa competitiva y visionaria para detonar su participación activa. Todos tenemos la responsabilidad para ayudar a construirla. No solo debemos buscar al candidato; debemos armar el paquete completo para tener un gobierno de coalición, democrático y social: propuestas concretas, organización eficiente y líderes generosos porque, estamos perdiendo por default.

En su videocolumna de opinión, Joaquín López-Dóriga espetó su molestia con los partidos de oposición porque no han logrado construir un candidato rumbo al 2024: “No tiene un solo líder capaz de competir”. Esta polémica declaración se volvió viral y generó muchos comentarios a favor y en contra.

Somos una mayoría, los mexicanos que estamos preocupados por el rumbo del país, pero no hemos logrado transformarla en un proyecto nacional sólido y competitivo que nos articule a todos los que pensamos que el país no va por buen camino.

Somos la mayoría de la población los que reconocemos la inseguridad como el principal problema por la violencia, los feminicidios, y la presencia creciente del crimen organizado. En un segundo lugar tenemos el tema de la inflación y la falta de inversión que ralentizan el crecimiento económico y empobrecen a la población más vulnerable.

Es la gran paradoja: la alta aprobación del presidente y el amplio margen que Morena mantiene en las preferencias electorales rumbo al 2024 y el fuerte aumento de entidades que gana, a pesar de la falta de resultados y de cumplimiento de las promesas de campaña.

Por eso nos caló tanto a quienes no queremos que el país continúe por el mismo rumbo, que a estas alturas la oposición no tuviera un líder capaz de ganar en el 24. Flota una angustia de futuro ante una oposición que no ha logrado consolidar suficientemente su propuesta.

La 4T, el Foro de Sao Paulo, el Grupo Puebla representan proyectos estructurados, para impulsar una agenda ideológica y política concreta y disciplinada aprovechando el ambiente crispado por la desigualdad, los privilegios y la concentración de poder en unos cuantos.

No solo falta encontrar a un candidato. Falta un proyecto. Una propuesta social y democrática que contraste con el populismo autoritario que ha fincado el presidente Andrés Manuel. Una propuesta ciudadana, plural, basada en los derechos humanos, la defensa de las instituciones y de la libertad de las personas. Una propuesta que logre proyectar a México a la economía del conocimiento, de la innovación, de las políticas ecológicas sustentables con gobernanza, transparencia y rendición de cuentas. El desarrollo social que desarrolle capacidades y amplie oportunidades; no la visión asistencial y clientelar de morena.

Debemos construir la mayor unidad posible de todos los que estamos preocupados y transmitirles a los partidos que deben ver por encima de sus proyectos particulares.

No tendremos ninguna posibilidad de avanzar mientras no logremos cambiar la percepción generalizada que recoge la encuesta publicada por el Grupo Reforma: que Morena es el partido que defiende a los pobres, maneja mejor los programas sociales y se preocupa por la gente; que el PRI es el partido qu le ha hecho más daño al país y roba más cuando gobierna; de que el PAN está desdibujado y de que MC quiere deslindarse para hacer la jugada individual.

No hay tiempo que perder. La sociedad está demandando una alternativa competitiva y visionaria para detonar su participación activa. Todos tenemos la responsabilidad para ayudar a construirla. No solo debemos buscar al candidato; debemos armar el paquete completo para tener un gobierno de coalición, democrático y social: propuestas concretas, organización eficiente y líderes generosos porque, estamos perdiendo por default.