En días pasados se llevó a cabo la famosísima rifa del avión presidencial; sin duda una de las banderas de campaña del Presidente López Obrador, le dio para discurso de precampaña, de campaña, en el periodo de transición y ya en el ejercicio de gobierno le dio para tema en un sinnúmero de sus conferencias mañaneras.
Una rifa que no cumplió su objetivo, que dé inicio a fin estuvo plagada de mentiras, datos falsos, ocurrencias; un avión que no se rifo y que aun debemos, un país partiéndose en cachitos como los de la lotería, un Director de la Lotería Nacional prestándose al juego mediático incluso llegando al llanto en el mismo acto. Esa fue la rifa y el tema sigue dando mucho de qué hablar.
Rifas tipo kermesse es en lo que ha girado este fallido gobierno, me llama la atención que uno de sus colaboradores en el Estado de Chihuahua, haya posteado en redes apenas acabose el sorteo, que estaban listos para la otra rifa y que en este capítulo podría ser la casa blanca (emblema de la corrupción del gobierno del expresidente Peña Nieto), o incluso otro bien al cabo ya encarrilados y de prisa.
Ahora el Presidente necesita de una nueva cortina de humo, un nuevo espectáculo para sus mañaneras, no solo necesita sino que le urge, para seguir evadiendo los temas reales en nuestro país, tales como la mayor crisis de violencia en la historia moderna, asesinatos por toda la República; seguir ignorando a los más de 70,000 muertos por covid y su mal manejo de la pandemia; evadir el fracaso de la refinería de Dos Bocas, su aeropuerto de Santa Lucia y el fallido desde su origen, tren maya. ¿ Y del huachicol? Mejor ni hablamos, una cortina más que utilizo el Presidente al principio de su administración, ahora ya no se habla del tema como si por arte de magia se hubiera acabado este delito.
Juzgar o no a los expresidentes, esta será la nueva ocurrencia que estaremos viendo día a día y será repetida hasta el cansancio, el Presidente quiere someter a consulta la ley vigente, y no es que sea un ignorante del Derecho, al contrario él sabe muy bien quienes son los órganos competentes para dicho enjuiciamiento.
Cada mañana repetirá una y otra vez los mismos datos, las redes sociales se invadirán de dicho tema, la recolección de firmas fracaso, por eso el Presidente mismo mando al Senado la propuesta, del Senado a la Corte y así pasan los días, mientras México sigue fracturándose.
Un país que el propio Ejecutivo Federal se encarga de polarizar, entre buenos y malos, entre liberales y conservadores; un Presidente encapsulado en la época de la guerra de Reforma como si aquel pasaje histórico se repitiera en la actualidad, es su obsesión y con ella nos arrastra a mas de 130 millones de mexicanos. Un hombre que se levanta con el objetivo de mantenerse en el poder, aunque no utilice este para servir a los demás, cual es el fin supremo de la política misma, perpetuarse en él, destruyendo las instituciones y los programas que le han costado tanto a México y a los mexicanos.
López Obrador juega a las ocurrencias, a la improvisación en el gobierno, a ser el todopoderoso, prueba de ello que fuera de su amigo y principal operador político, Marcelo Ebrard, no ha dado oportunidad a que otros secretarios de Estado brillen, ha incluso absorbido para sí, las tareas de las secretarias. No vemos un proyecto integral en materia hacendaria, de sustentabilidad ambiental, un combate a la delincuencia, y que decir en el área de salud; cada dia se han ido desdibujando mas las Secretarias junto con sus titulares, que por cierto a estas fechas y de acuerdo a lo prometido ya deberían tener sus sedes en los Estados de la Republica.
Peligroso lo que se avecina, únicamente el pueblo que fue quien lo llevo al poder en el 2018, podrá poner un freno a esta cascada de ocurrencias, eso se vera en las elecciones intermedias del 2021, por ello y mas este es un tema al que hay que entrarle.
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