/ lunes 12 de julio de 2021

Momento Corporativo | ¿Quién quiere el control de Grupo Aeroméxico?

Si bien los procesos de reestructura financiera buscan mantener a flote un negocio, muchas veces también sirven para que inversionistas financieros persigan el control de una empresa que recupere su potencial una vez que supere el bache financiero. Y el mensaje que envió el “grupo de actuales accionistas mexicanos y empresarios”, encabezados por Eduardo Tricio, es que quieren recuperar el control de Grupo Aeroméxico que primero se diluyó con la compra de hasta 49% de la compañía aérea por parte de Delta, y que ahora está supeditada a las decisiones del fondo Apollo, que con un préstamo de mil millones de dólares, salió al rescate de Grupo Aeroméxico. El plan de reestructura contempla la emisión de nuevo capital y es donde los empresarios locales ya levantaron a mano, aunque Delta ya hizo lo propio al anunciar la compra de 185 millones de dólares del crédito que otorgó Apollo a la aerolínea mexicana para tratar de mantener su participación accionaria. Los números de Grupo Aeroméxico comienzan a mejorar, y conforme las señales de recuperación económica sean más sólidas y se pueda solventar de mejor manera las terceras o cuartas olas de contagios, la compañía recuperaría su atractivo y con ello el interés de más de uno de controlarla.

Muchas alas

Será en el último trimestre del año cuando debute en la CdMx el primer restaurante de comida rápida que incluirá los conceptos Fatburger y Buffalo’s Express como parte del acuerdo que recién anunció FAT Brands que dirige Andy Wiederhorn y Red Rombo Group propiedad del empresario Jaime Parra, para abrir hasta 50 establecimientos en los próximos cinco años. Este concepto de marca compartida fue bien recibido por los consumidores en Estados Unidos donde 70% de los establecimientos de la cadena ya operan bajo esta modalidad, y antes de México la propuesta se exportó a diversos países. La dupla quiere aprovechar los cambios en los hábitos de los consumidores, la novedad del concepto y la demanda por formatos más económicos para competir con otras franquicias afectadas por la pandemia, y que ahora están más ocupadas en enderezar sus operaciones que en la importación y lanzamiento de nuevas propuestas. El mes pasado Fat Brands desembolsó 425 millones de dólares en la compra de cinco cadenas de restaurantes que le permitió ampliar su portafolio a 14 conceptos. A lo largo de los años, las adquisiciones han sido el motor del crecimiento de la compañía, que a finales del año pasado, por ejemplo, cerró la compra de Johnny Rockets.

Mayor vigilancia

La multilatina Softys que dirige Gonzalo Darraidou, y que tiene presencia mediante filiales en Chile, Argentina, Brasil, Colombia, Perú, Ecuador, Uruguay, y México, quiere que para 2025, 100% de sus proveedores transparente su gestión a través de una plataforma de calificación para evaluar la responsabilidad social, desempeño medioambiental, social, ético y de su cadena de suministro.

@robertoah

Si bien los procesos de reestructura financiera buscan mantener a flote un negocio, muchas veces también sirven para que inversionistas financieros persigan el control de una empresa que recupere su potencial una vez que supere el bache financiero. Y el mensaje que envió el “grupo de actuales accionistas mexicanos y empresarios”, encabezados por Eduardo Tricio, es que quieren recuperar el control de Grupo Aeroméxico que primero se diluyó con la compra de hasta 49% de la compañía aérea por parte de Delta, y que ahora está supeditada a las decisiones del fondo Apollo, que con un préstamo de mil millones de dólares, salió al rescate de Grupo Aeroméxico. El plan de reestructura contempla la emisión de nuevo capital y es donde los empresarios locales ya levantaron a mano, aunque Delta ya hizo lo propio al anunciar la compra de 185 millones de dólares del crédito que otorgó Apollo a la aerolínea mexicana para tratar de mantener su participación accionaria. Los números de Grupo Aeroméxico comienzan a mejorar, y conforme las señales de recuperación económica sean más sólidas y se pueda solventar de mejor manera las terceras o cuartas olas de contagios, la compañía recuperaría su atractivo y con ello el interés de más de uno de controlarla.

Muchas alas

Será en el último trimestre del año cuando debute en la CdMx el primer restaurante de comida rápida que incluirá los conceptos Fatburger y Buffalo’s Express como parte del acuerdo que recién anunció FAT Brands que dirige Andy Wiederhorn y Red Rombo Group propiedad del empresario Jaime Parra, para abrir hasta 50 establecimientos en los próximos cinco años. Este concepto de marca compartida fue bien recibido por los consumidores en Estados Unidos donde 70% de los establecimientos de la cadena ya operan bajo esta modalidad, y antes de México la propuesta se exportó a diversos países. La dupla quiere aprovechar los cambios en los hábitos de los consumidores, la novedad del concepto y la demanda por formatos más económicos para competir con otras franquicias afectadas por la pandemia, y que ahora están más ocupadas en enderezar sus operaciones que en la importación y lanzamiento de nuevas propuestas. El mes pasado Fat Brands desembolsó 425 millones de dólares en la compra de cinco cadenas de restaurantes que le permitió ampliar su portafolio a 14 conceptos. A lo largo de los años, las adquisiciones han sido el motor del crecimiento de la compañía, que a finales del año pasado, por ejemplo, cerró la compra de Johnny Rockets.

Mayor vigilancia

La multilatina Softys que dirige Gonzalo Darraidou, y que tiene presencia mediante filiales en Chile, Argentina, Brasil, Colombia, Perú, Ecuador, Uruguay, y México, quiere que para 2025, 100% de sus proveedores transparente su gestión a través de una plataforma de calificación para evaluar la responsabilidad social, desempeño medioambiental, social, ético y de su cadena de suministro.

@robertoah