/ lunes 22 de abril de 2019

Notre Dame: entre la controversia y la fe

Han transcurrido mas de 856 años desde que se inició la construcción de la catedral símbolo del Catolicismo Frances y máxima expresión del arte gótico en la ciudad luz, Paris. Desde aquellos años en la parte alta de la edad media, de la sociedad teocéntrica y de la transformación de la sociedad rural de los alrededores parisinos a la vida urbana de los que sería considerada hasta hoy, por muchos, la más bella ciudad del mundo.

Cito lo anterior brevemente, debido a que el pasado lunes 15 de abril, esta hermosa obra de la civilización cristiana ardió en llamas y por lo menos un tercio de su construcción quedo reducida a cenizas. La aguja de la catedral colocada desde el siglo antepasado cuando la catedral fue objeto de una reconstrucción general y cuando fue adicionado el rosetón sur de la misma, el cual al igual que la aguja quedo completamente destrozada.

El mundo fue testigo, de este impresionante incendio en catedral que el famoso escritor francés Víctor Hugo hiciera parte protagónica en su magnifica obra llamada precisamente“Nuestra Señora de Paris” (1831). En dicha obra aparecen personajes que el propio Disney uso para su película llamada “El Jorobado de Notre Dame”.

En fin, de una forma u otra Notra Dame ha estado en la mente de muchos en todo el mundo, y ahí estaba a la vista de todos quemándose en vivo. La destrucción total, pero a la par la fe. Pues mientras se quemaba lentamente el techo de la catedral los católicos de Francia y el mundo que contemplaban dicha hoguera en la que casi nueve siglos de historia se consumían, rezaba y cantaban canticos al todo poderoso, como comprometiéndose a reconstruir a la brevedad, semejante coloso de la cristiandad.

Horas después de que el valeroso cuerpo de bomberos de París aplacara al fuego en Notra dame, el presidente Frances Emmanuel Macron, salió a los medios a dar puntual informe de la situación respecto al incendio en Notra Dame, pero también para anunciar que el gobierno francés asumirá la responsabilidad de reconstruir la famosa catedral. Ahí mismo el presidente macron hizo un llamado a la cristiandad francesa y de todo el mundo de colaborar con sus aportaciones para la reconstrucción.

Y el milagro sucedió, pues apenas unas horas después del llamado de auxilio que lanzara el presidente Macron para reconstruir la catedral de Notra dame, se habían reunido casi mil millones de dólares para tal efecto, se recibieron donaciones de grandes corporaciones tales como Apple, Channel, L’Oreal, Dior; entre otros. No obstante, se estima que la reconstrucción costara 5 veces más.

Contrario a la fe y apoyo mostrado por los católicos en el mundo un grupo de ecologistas o filántropos del internet, han criticado que en tan poco tiempo se haya reunido casi 1000 millones de dólares para la ansiada reconstrucción, anteponiendo a ello imágenes de niños del África muriendo de hambre o desastres ecológicos en el mundo, y el mismo México con incendios forestales en 17 Estados del país. Y preguntándose ¿Cómo explicarle a este niño que se puede reunir tal cantidad para reconstruir una iglesia y no para saciar el hambre? A ello a quienes hacen estas publicaciones habría que preguntarles, ¿Cuánto dinero han donado para quitarle el hambre a los niños del mundo, o cuantos árboles han sembrado? Pues “¿Por qué miras la paja que hay en el ojo de tu hermano y no ves la viga que está en el tuyo? ¿Cómo puedes decir a tu hermano: “Hermano, deja que te saque la paja de tu ojo”, ¿tú que no ves la viga que tienes en el tuyo?

Es decir, las donaciones fueron un acto de caridad, no un acto de mezquindad, ¿Por qué tanto pesar por el apoyo de unos a otros? Por qué no mejor tomarlo como ejemplo para apoyar a las causas que a los propios les interesan más. Buscar acciones y hacerlas virales, algo mejor que juzgar. Edificar y apoyar por un mundo mejor.

Quiero concluir reconociendo el esfuerzo de las almas caritativas que se han desprendido de lo poco o mucho que tenían para darle nueva vida a un monumento no solo de la cristiandad, sino patrimonio de la humanidad.


Han transcurrido mas de 856 años desde que se inició la construcción de la catedral símbolo del Catolicismo Frances y máxima expresión del arte gótico en la ciudad luz, Paris. Desde aquellos años en la parte alta de la edad media, de la sociedad teocéntrica y de la transformación de la sociedad rural de los alrededores parisinos a la vida urbana de los que sería considerada hasta hoy, por muchos, la más bella ciudad del mundo.

Cito lo anterior brevemente, debido a que el pasado lunes 15 de abril, esta hermosa obra de la civilización cristiana ardió en llamas y por lo menos un tercio de su construcción quedo reducida a cenizas. La aguja de la catedral colocada desde el siglo antepasado cuando la catedral fue objeto de una reconstrucción general y cuando fue adicionado el rosetón sur de la misma, el cual al igual que la aguja quedo completamente destrozada.

El mundo fue testigo, de este impresionante incendio en catedral que el famoso escritor francés Víctor Hugo hiciera parte protagónica en su magnifica obra llamada precisamente“Nuestra Señora de Paris” (1831). En dicha obra aparecen personajes que el propio Disney uso para su película llamada “El Jorobado de Notre Dame”.

En fin, de una forma u otra Notra Dame ha estado en la mente de muchos en todo el mundo, y ahí estaba a la vista de todos quemándose en vivo. La destrucción total, pero a la par la fe. Pues mientras se quemaba lentamente el techo de la catedral los católicos de Francia y el mundo que contemplaban dicha hoguera en la que casi nueve siglos de historia se consumían, rezaba y cantaban canticos al todo poderoso, como comprometiéndose a reconstruir a la brevedad, semejante coloso de la cristiandad.

Horas después de que el valeroso cuerpo de bomberos de París aplacara al fuego en Notra dame, el presidente Frances Emmanuel Macron, salió a los medios a dar puntual informe de la situación respecto al incendio en Notra Dame, pero también para anunciar que el gobierno francés asumirá la responsabilidad de reconstruir la famosa catedral. Ahí mismo el presidente macron hizo un llamado a la cristiandad francesa y de todo el mundo de colaborar con sus aportaciones para la reconstrucción.

Y el milagro sucedió, pues apenas unas horas después del llamado de auxilio que lanzara el presidente Macron para reconstruir la catedral de Notra dame, se habían reunido casi mil millones de dólares para tal efecto, se recibieron donaciones de grandes corporaciones tales como Apple, Channel, L’Oreal, Dior; entre otros. No obstante, se estima que la reconstrucción costara 5 veces más.

Contrario a la fe y apoyo mostrado por los católicos en el mundo un grupo de ecologistas o filántropos del internet, han criticado que en tan poco tiempo se haya reunido casi 1000 millones de dólares para la ansiada reconstrucción, anteponiendo a ello imágenes de niños del África muriendo de hambre o desastres ecológicos en el mundo, y el mismo México con incendios forestales en 17 Estados del país. Y preguntándose ¿Cómo explicarle a este niño que se puede reunir tal cantidad para reconstruir una iglesia y no para saciar el hambre? A ello a quienes hacen estas publicaciones habría que preguntarles, ¿Cuánto dinero han donado para quitarle el hambre a los niños del mundo, o cuantos árboles han sembrado? Pues “¿Por qué miras la paja que hay en el ojo de tu hermano y no ves la viga que está en el tuyo? ¿Cómo puedes decir a tu hermano: “Hermano, deja que te saque la paja de tu ojo”, ¿tú que no ves la viga que tienes en el tuyo?

Es decir, las donaciones fueron un acto de caridad, no un acto de mezquindad, ¿Por qué tanto pesar por el apoyo de unos a otros? Por qué no mejor tomarlo como ejemplo para apoyar a las causas que a los propios les interesan más. Buscar acciones y hacerlas virales, algo mejor que juzgar. Edificar y apoyar por un mundo mejor.

Quiero concluir reconociendo el esfuerzo de las almas caritativas que se han desprendido de lo poco o mucho que tenían para darle nueva vida a un monumento no solo de la cristiandad, sino patrimonio de la humanidad.