/ lunes 28 de enero de 2019

Teléfonos inteligentes, el reto de los Milennials

A finales del año pasado, como cumplimiento de una promesa de campaña del presidente Emmanuel Macron, en Francia, se prohibió el uso de celulares en las escuelas a nivel primaria y secundaria. Que si bien es cierto, dicha prohibición se estableció desde el año 2010, la misma se limitaba al horario de clases. En 2018 se amplió a todo horario escolar, incluyendo recreo, o receso.

Dicha medida tiene como fundamento, que el uso excesivo de teléfonos celulares o dispositivos móviles de cualquier tipo, perjudica seriamente la interacción social, ocasiona poca o nula activación física entre los menores, y además, sirvió como medida para disminuir el acoso escolar vía cibernética.

El llamado teléfono inteligente, que no es otra cosa, que, un teléfono celular con pantalla táctil y con muchas de las prestaciones de una computadora. Un fenómeno que es todo un reto para los Milennials, pues somos la primer generación que esta ejerciendo el rol de padres, con la responsabilidad de aprender, y de enseñar a nuestros hijos, a evitar que esta tecnología lejos de mejorar la comunicación la trunque.

Uno no puede extrañar lo que no conoce…

Así, nuestros hijos no pueden extrañar el entretenerse jugando a la casita hecha con sábanas y sillas, las escondidas, el mamaleche, juegos de mesa, leer…Algo mas que vídeo juegos, ver videos de cualquier interés o entretenerse con memes.

Disfrutar de una charla cara a cara sin la interrupción de un celular.

Hacer amigos a la antigua, no solo con una solicitud de amistad.

Observar los detalles, el camino, las personas, el presente.

Que se puede salir a pasear, viajar, ir a comer y si, es bueno tomar fotos, pero no es lo principal, sino el gozar, vivir, degustar.

Tener tiempo para reflexionar, meditar, estar en paz. Sentir libertad y no la ansiedad de estar presos frente al celular.

Tantas y tantas cosas mas…

La iniciativa de ley a que me réferi al principio del texto, seria un excelente modelo a seguir por nuestros gobernantes. Espero lo tomen en consideración. Asimismo en cuanto a los gobernados, deseo con vehemencia que enseñemos a las futuras generaciones a ver la vida con nuestros propios ojos, y no a través de una pantalla.

Daniela Morales Ruiz

Periodista y abogada

danielamoralesruiz@hotmail.com

A finales del año pasado, como cumplimiento de una promesa de campaña del presidente Emmanuel Macron, en Francia, se prohibió el uso de celulares en las escuelas a nivel primaria y secundaria. Que si bien es cierto, dicha prohibición se estableció desde el año 2010, la misma se limitaba al horario de clases. En 2018 se amplió a todo horario escolar, incluyendo recreo, o receso.

Dicha medida tiene como fundamento, que el uso excesivo de teléfonos celulares o dispositivos móviles de cualquier tipo, perjudica seriamente la interacción social, ocasiona poca o nula activación física entre los menores, y además, sirvió como medida para disminuir el acoso escolar vía cibernética.

El llamado teléfono inteligente, que no es otra cosa, que, un teléfono celular con pantalla táctil y con muchas de las prestaciones de una computadora. Un fenómeno que es todo un reto para los Milennials, pues somos la primer generación que esta ejerciendo el rol de padres, con la responsabilidad de aprender, y de enseñar a nuestros hijos, a evitar que esta tecnología lejos de mejorar la comunicación la trunque.

Uno no puede extrañar lo que no conoce…

Así, nuestros hijos no pueden extrañar el entretenerse jugando a la casita hecha con sábanas y sillas, las escondidas, el mamaleche, juegos de mesa, leer…Algo mas que vídeo juegos, ver videos de cualquier interés o entretenerse con memes.

Disfrutar de una charla cara a cara sin la interrupción de un celular.

Hacer amigos a la antigua, no solo con una solicitud de amistad.

Observar los detalles, el camino, las personas, el presente.

Que se puede salir a pasear, viajar, ir a comer y si, es bueno tomar fotos, pero no es lo principal, sino el gozar, vivir, degustar.

Tener tiempo para reflexionar, meditar, estar en paz. Sentir libertad y no la ansiedad de estar presos frente al celular.

Tantas y tantas cosas mas…

La iniciativa de ley a que me réferi al principio del texto, seria un excelente modelo a seguir por nuestros gobernantes. Espero lo tomen en consideración. Asimismo en cuanto a los gobernados, deseo con vehemencia que enseñemos a las futuras generaciones a ver la vida con nuestros propios ojos, y no a través de una pantalla.

Daniela Morales Ruiz

Periodista y abogada

danielamoralesruiz@hotmail.com