Los males respiratorios aumentan 40% por frío

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Los niños menores de cinco años, los adultos mayores de 60 y las personas con enfermedades crónicas no controladas son los más vulnerables ante las infecciones de vías respiratorias, que incrementan hasta en 40 por ciento en temporada de frío, por lo que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) invita a la población a tomar las medidas necesarias para evitar dichas enfermedades.

“Hasta el momento se ha detectado incremento del diez por ciento en los casos de infecciones en vías respiratorias, lo cual es normal durante esta temporada de frío”, señaló Maritza Maldonado Cisneros, epidemióloga de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 13, del IMSS.

Los síntomas dependen del agente causal, que puede ser viral o bacteriano; en el primer caso el paciente presenta escurrimiento nasal, estornudos, malestar general, dolor muscular o dolor en las articulaciones, fiebre ligera, ojos llorosos y disfonía.

Cuando el moco cambia de color a verde o amarillo y la fiebre es más intensa, se trata de una infección originada por una bacteria, con la cual aumentan las probabilidades de una complicación del aparato pulmonar.

“Es importante señalar que el 95 por ciento de los casos que acuden con el médico familiar por una infección respiratoria son de las vías superiores, que afecta desde la nariz hasta la epiglotis que dura menos de 15 días, estos padecimientos son ocasionados por un virus”, añadió Maritza Maldonado. Indicó que con los primeros síntomas se puede optar por un tratamiento sintomático, cuando es una bacteria la causante se utiliza el antibiótico, pero no siempre se hará uso de este medicamento, a menos que un médico así lo señale de acuerdo a la sintomatología del paciente, advirtió. El IMSS recomienda seguir medidas preventivas como la vacunación contra la influenza, uno de los principales virus que se manifiesta en esta temporada y que puede aplicarse en Unidades de Medicina Familiar (UMF) a niños menores de cinco años, personas mayores de 60, personal de salud, personas con enfermedades crónicas no controladas, y mujeres embarazadas.

Así como del lavado frecuente de manos con agua y jabón para evitar el contagio, estornudar y toser cubriéndose con el interior del codo o antebrazo, aumentar la ingesta de alimentos ricos en vitamina A y C, no exponerse a los cambios bruscos de temperatura, así como consumir muchos líquidos.