Registro Civil de Veracruz dejó de realizar cambios de identidad de género en actas de nacimiento: activista
Estaría incumpliendo con la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
Ariadna García
La dirección del Registro Civil del estado de Veracruz dejó de realizar procedimientos en vía administrativa de cambios sexo genérico en actas de nacimiento de personas trans, pues actualmente se realizan únicamente por mandato judicial aun cuando existe jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), de acuerdo con representantes de colectivos.
Con la llegada de la nueva administración, personas trans, se encontraron con que no se podían realizar cambios de nombre o sexo en sus actas de nacimiento como se hizo hasta el sexenio pasado, ante la falta de una armonización del Código Civil de Veracruz con lo que establece la SCJN.
Según datos de la dirección del Registro Civil del estado del 2021 al 2024 se hicieron en promedio 980 procedimientos de cambios sexo genéricos.
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Y es que, en el gobierno anterior, en cumplimiento con el precedente obligatorio aprobado por la Sala Constitucional del Tribunal Superior de Justicia del Estado publicado en la Gaceta Oficial el 10 de agosto de 2021 se podía hacer ese trámite, pese a que no hubo modificación al Código.
En este se lee: “a fin de regular el procedimiento respecto a la expedición de una nueva acta de adecuación a la identidad de género auto percibida, en la que se rectifiquen los datos relativos al nombre y sexo de una persona la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la Jurisprudencia número 2ª./J.173/2019 (10ª), estableció que la vía administrativa es la idónea para la adecuación o expedición de las actas de nacimiento por reasignación sexo-genérica, pues ésta cumple con los estándares de privacidad, sencillez, expedites y adecuada protección de la identidad de género autopercibida; por lo que, enviar a la parte solicitante a sustanciarlo a la vía judicial, implica demoras y mayores formalidades en su tramitación (…)”.
Incluso añade que la negativa argumentando que la persona interesada primero debe acudir ante una autoridad jurisdiccional, para que ordene la expedición de una nueva acta y como consecuencia, la reserva del acta primigenia, es violatorio de los derechos humanos.
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Esto, de acuerdo con representantes de colectivos, aunque es algo que ya se esperaba, da muestra de que no ha existido voluntad de las últimas dos legislaturas llamadas “de la cuarta transformación” para aprobar la Ley de Identidad de Género que establezca este procedimiento y su aplicación no quede a consideración de ningún gobierno.
“Lo que está ocurriendo ahora creo que es algo que ya esperábamos, quienes tenemos varios años incidiendo en esta parte de la ley de identidad, sabíamos que la administración del exgobernador Cuitláhuac no nos daba una respuesta a la demanda de que ya se hiciera la adecuación a la ley, al Código Civil”, dijo el activista Bernabé Zuvirie Vázquez del Colectivo El Taller.
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Lo anterior, acusó, aunque se tiene el mandato de la Suprema Corte de Justicia de armonizar el Código Civil para que las personas trans puedan tener acceso a su identidad elegida.
“Estas legislaturas tampoco apoyaron, las legislaturas pasadas, se presentaron iniciativas para modificar la ley, con el diputado Ky, anteriormente con la diputada Adriana Capitanachi, pues ninguna de las dos iniciativas logró pasar, aunque la de Adriana Capitanachi sí fue dictaminada y tenían un dictamen, pues no se lograron aprobar”, recordó.
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Consideró que hay también “un poco de descuido” de las poblaciones LGBT+, porque se le ofreció a la comunidad trans esta herramienta (del procedimiento administrativo) por parte del entonces secretario de Gobierno Erick Cisneros para que el Registro Civil pudiera emitir estas actas y se pudieran resguardar (las primigenias), pero no hubo seguimiento.
“De antemano hubo activistas que no estuvimos de acuerdo porque sabíamos que era una medida temporal y tampoco hubo un plan de trabajo que nos llevara a reorganizarnos y seguir trabajando con la legislatura. Más bien ha sido otra vez, una vez más, a pesar de que estamos en la 4T y ahora en el segundo piso de la 4T, pues no ha habido voluntad política”.
Ahora, expuso, queda seguir insistiendo en que se modifique la ley, “ni siquiera es una reforma a la Constitución, es al Código Civil”.
Con esto, agregó, las personas trans o que quieren tener una identidad elegida, se van a tener que esperar hasta que el Congreso local logre presentar la reforma al Código Civil, para que una vez aprobada se puedan empezar a hacer estos trámites.
“Esta iniciativa ya la veníamos trabajando desde hace varias legislaturas, particularmente la clínica del Litigio Estratégico de la UV con la diputada Capitanachi y estaba muy bien elaborada, pero tú sabes que conforme va pasando la temporalidad hay que hacer las adecuaciones (…) en un principio solamente estaban las personas trans y no estaban las personas no binaries, estaban menos visibles, menos presentes, ahora creo yo que hay una presencia también más fuerte de las personas no binaries, no tengo idea de cómo la vayan a designar”.
Aunado a ello, consideró que existe un compromiso, y un “deber muy fuerte” para esta legislatura de Veracruz de que esta ley de identidad de género y otras que están pendientes, sean aprobadas, al estar conformada por personas feministas y disidentes sexuales, “tenemos personas lesbianas, tenemos una gran cantidad de personas que están visibles ahí en la legislatura y entonces tienen una doble responsabilidad de que pudiera salir este tema lo más pronto posible”.
Por su parte la activista Silvia Susana Jácome expuso que al momento hay versiones encontradas sobre el tema pues hay quienes dicen que no es que se haya cancelado el trámite administrativo, sino que se está renovando y esto lleva su tiempo por parte de la nueva administración estatal.
“Yo no sé, confieso que no sé si sea real o sea pretexto, pero el caso es que en este momento no se puede (hacer cambios sexogenéricos en las actas de nacimiento) ahora, ojalá que efectivamente se renueve y ya no haya ningún problema”.
Pese a ello, coincidió en que es importante que se tenga una ley de identidad de género mucho más amplia que incluso contemple infancias y adolescencias.
“Porque el decreto, el procedimiento (administrativo) fue bueno, funcionó, mucha gente pudo cambiar su nombre, pero tenía estos riesgos y también me parece, en caso de que se haya efectivamente cancelado, me parecería una muy mala señal por parte del Ejecutivo, porque los derechos humanos no se pueden echar para atrás; son progresivos, no pueden retroceder, esto sería un derecho ya alcanzado, a la identidad legal, que estaría retrocediendo, y entonces si es efectivamente un acuerdo o una orden o un mandato por parte del Ejecutivo sería una muy mala señal”, abundó.
Dentro de la ley de identidad de género, explicó, lo primero que se debe considerar es la posibilidad de cambiar nombre y género, tanto para mujeres y hombres trans como para personas no binaries y personas intersex, “que en el momento del nacimiento no tengan definido, lo pongo entre comillas, biológicamente el sexo, que en el acta de nacimiento pueda aparecer la X como en no binaries y una vez que la persona intersex ya reconozca su identidad de género, independientemente de su aspecto biológico acuda el Registro Civil y se pone en lugar del X la M o la H, lo que sea”.
Remarcó que la ley de identidad tendría que abarcar a las infancias y adolescencias, porque, destacó, la identidad de género se descubre.
“No es una moda, no es un gusto, no es un capricho, es una convicción muy personal que, desde la sexología te lo puedo decir, se descubre entre los dos y los tres años; no hay motivo para que se discrimine a las infancias y adolescencias, además ya en otras entidades de la república esto está contemplado”.
Si se habla de una ley integral, deberá contener también mecanismos que garanticen el acceso a todos los derechos humanos sin discriminación en cuestiones de salud, impartición de justicia, educación, trabajo y vivienda.
Y es que expuso que, aunque constitucionalmente se dice que todas las personas ciudadanas mexicanas tienen esos derechos, la realidad es que la identidad de género no convencional en muchas ocasiones les dificulta acceder a estos.
“Otro aspecto que también hemos platicado con las legisladoras es que los crímenes de odio hacia mujeres trans se tipifiquen como feminicidios, o en todo caso transfeminicidios, y en el caso de hombres trans, como crímenes de odio por identidad de género”, precisó.
Asimismo, explicó que aun cuando en este momento no se puedan hacer estas modificaciones sexo genéricas en las actas de nacimiento, la gente que ya hizo su cambio de identidad, ya tiene asegurados sus documentos y no hay marcha atrás.
Aunque se buscó a la titular de la dirección del Registro Civil del estado para dar su opinión al respecto, prefirió hacerlo tras la reunión que sostendrá con representantes de colectivos LGBT+ en estos días para abordar el tema.
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