Crianza de gallinas en Chiapas: una alternativa viable para familias rurales

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Thiaré García / El Heraldo de Chiapas

En comunidades rurales de Chiapas, un grupo de familias ha encontrado en la crianza de gallinas de doble propósito una alternativa viable para mejorar su alimentación y generar ingresos. El proyecto, que actualmente se desarrolla en el ejido Carmen Tonampak, Chiapa de Corzo, y en Cárdenas, municipio de San Fernando, busca fortalecer la producción de carne y huevo de manera sostenible, beneficiando a al menos 15 familias en su primera etapa en Chiapa de Corzo.

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María Patricia Gómez, asesora del programa e integrante de la Dirección General de Educación, Agropecuaria y Ciencias del Mar, explicó que la iniciativa está diseñada para que las familias comiencen con un paquete inicial de 10 gallinas, permitiéndoles aprender sobre su manejo desde la vacunación hasta la alimentación y la comercialización. Con el tiempo, el número de aves se incrementa a 30 por familia, lo que representa una producción estimada de 30 huevos diarios una vez que las gallinas alcanzan los cinco meses de edad.

“La idea es que las familias no solo tengan acceso a alimento fresco y de calidad, sino que también puedan comercializar los excedentes y generar un ingreso extra”, señaló Gómez. “Estamos brindando acompañamiento para que el proceso sea eficiente y sostenible, reduciendo costos y maximizando beneficios”.

El programa, que aún se encuentra en sus primeras fases, ha demostrado ser una opción redituable para las comunidades participantes. “Es un proyecto que a largo plazo ofrece estabilidad, ya que las familias pueden consumir los productos, venderlos o incluso expandir su producción”, añadió la asesora.

Mientras tanto, una de las productoras de animales de traspatio quien inició este proyecto es María Sedena Gómez Díaz, quien desde hace un año quería iniciar, pero antes las circunstancias no podía, fue hace 3 meses que comenzó.
Gómez Díaz inició con 25 aves, asesorada por María Patricia, es que ha logrado ir avanzando, ante ello se sumaron otros 6 pollos más que su madre le dio. Esta crianza ha sido únicamente para consumo de ellos.

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Su inversión inicial fueron al menos 4 mil 500. “Al principio yo creo que por la práctica que no tenía, si se me estaba haciendo pesadito, a 30 pollos les estaba dando 10 kilos diarios y el alimento no me resultaba (...) ahora les estamos dando maíz, verdura o arroz“, señaló.

Los organizadores invitan a más familias a sumarse a la iniciativa, destacando que la producción de gallinas de doble propósito es una alternativa accesible y sostenible para mejorar la economía y la seguridad alimentaria en las comunidades rurales de Chiapas.