Confiesa la robachicos que su plan se salió de control
Le esperan 7 años de prisión
Alejandro Ruiz
Durante la audiencia de la joven Janeth Adriana Chávez Leyva, ésta pidió que se resolviera de una vez su situación jurídica y se acreditó el juicio abreviado, donde el ministerio público solicitó a la jueza la condena de 7 años de prisión para la joven robachicos, quien bajo engaños secuestró un bebé para hacerlo pasar como suyo, manifestó sentirse “arrepentida y que todo se le salió de control”, además se destapó que todo fue parte de un chantaje para poder regresar con su novio Daniel.
Durante cinco horas y media de desahogo testimonial, a la presunta secuestradora le fue dictado auto de vinculación a proceso y el Ministerio Público solicitó, como lo marca la ley, una pena de 1 a 5 años “a quien sustraiga un menor sin comprobar su legal paternidad o custodia”, pero al ser solicitado por la imputada la resolución de su situación jurídica la parte acusatoria y la defensoría, llegaron a un acuerdo aceptado por la madre del bebé de solicitar se le impusiera a la joven Janeth Adriana Chávez Leyva la pena de 7 años de prisión renunciando a su juicio oral.
Un nuevo elemento se agregó en el caso y fue la declaración del exnovio de la joven, “Daniel”, quien manifestó haber sido parte del engaño, ya que le aseguró que el bebé que supuestamente esperaba era de él.
Él siguió por teléfono su embarazo e incluso le llegó la noticia del nacimiento, pero luego varios amigos le comenzaron a decir que ese bebé era muy parecido al de la alerta Ámber de la Fiscalía.
Él y sus amigos acudieron a la FGE para hacer su declaración de saber sobre el paradero de ese bebé robado y fue cuando las autoridades se encargaron de investigar y dar con ella y la criatura.
Janeth sostuvo incluso tras la detención que el bebé era suyo, sin embargo los avances de la ciencia la desmintieron, pues resultó negativo el examen de parto reciente.
Como se informó, la imputada de 22 años de edad había inventado a su círculo de amigas sobre su embarazo y que tenía fecha de parto el 5 de diciembre, en la presentación del caso por parte del MP obran las declaraciones de varias de sus amigas, quienes coincidían en que les había contado que estaba embarazada y que se aliviaría en El Paso, Texas, y que se hacía chequeos médicos allá y aquí en Chihuahua, hasta fotos les enviaba.
La narrativa de varios testigos, aunado a videos analizados por el Ministerio Público, coincide en que la detenida participó en la sustracción.
En la declaración de la imputada ella misma dio a conocer que se trató de un engaño porque estaba triste por haber roto la relación con Daniel, pero este se le salió de control, incluso antes de ser asesorada por los abogados, manifestó que pensó en dejar al bebé en algún sitio y llamar a la madre para decirle dónde estaba, pero su familia y abogados la convencieron de entregarse voluntariamente.
Así mismo la joven señaló que por varios días antes de realizar el rapto del menor deambuló por Ciudad Juárez, Delicias y esta ciudad, durmiendo incluso en los alrededores de varios hospitales; así mismo señaló que antes de robar el bebé, había interceptado a otra pareja con el mismo ofrecimiento de la ropa, pero a éstos les pareció raro y no le hicieron mucho caso, luego fue cuando vio salir del Hospital Central a la madre del bebé y su abuela, a las cuales abordó con los resultados ya descritos en la denuncia.
La agentes del Ministerio Público manifestaron que luego de dar con varias denuncias hechas por amigas de la joven Janeth, incluso su exnovio catearon la vivienda de Quintas Quijote, donde se encontró la ropa del bebé, la cual llevaba al momento de su rapto.
Luego ubicaron a la imputada en el domicilio de la colonia Granjas, donde sus abuelos, sus padres y sus abogados ya la acompañaban, y donde la hermana de la imputada entregó inicialmente a las autoridades la pañalera del bebé, la cual además de ropa traía dentro la pulsera del hospital que la raptora arrancó de la muñeca del bebé, y así mismo se encontraba la venda que se había utilizado como faja del ombligo del bebé, la cual tenía aún pegado su ombligo.
Aunado a esto, la joven renunció a su juicio oral y aceptó su participación en el delito de sustracción de menores ante la jueza en turno, por lo que le fueron impuestos siete años de prisión sin derecho a beneficios, tras acuerdo de ambas partes.