La Quebrada y su valentía le dieron el sustento por 37 años

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Rolando es un viejo clavadista de La Quebrada que vivió arrojándose por 37 años desde lo más alto del famoso risco que se ha convertido en un emblema de toda la turística del llamado Acapulco Tradicional.

Tiene grandes historias vividas y que contar en estos 37 años de trabajo como clavadistas, desde las platicas que sostuvo con grandes estrellas de la farándula como el cantante José José y la española mas mexicana Roció Durcal que llegaron hasta este lugar de Acapulco para disfrutar del mejor espectáculo que ha tenido por muchas décadas este destino de playa.

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El clavadista Rolando nació en el histórico Barrio de los Tepetates en el puerto de Acapulco, y es hijo de padres originarios del municipio de Chilapa quienes llegaron a esta ciudad en busca de una mejor vida en este puerto donde se vivía una época de oro en el turismo nacional e internacional.

“La primera vez que me avente de los más alto que son 35 metros del risco de La Quebrada, fue cuanto tenía entre 17 o 18 años de edad, se vive la adrenalina, el miedo pero también se tiene una sensación muy bonita, sobre todo cuando te reconocen su esfuerzo con los aplausos que los turistas que diariamente se tenía en la plazoleta de la famosa e internacional Quebrada”, dijo.

Reconoció que durante el tiempo en el que él estaba activo arrojándose de La Quebrada al mar, se vivía otra época, en Acapulco no se dormía, llega el turismo extranjero, el nacional y los famosos, como la cantante Roció Durcal, una mujer muy sencilla y el famoso José José, a los que conoció el restaurante La Perla en el famoso hotel Mirador.

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Dijo que hoy la situación es diferente a años anteriores debido a los problemas que se han tenido y que han afectado de manera considerable la actividad turística de Acapulco.

Yo creo que hace falta más promoción de Acapulco, para recuperar por lo menso poquito de los que antes se tenía cuando se vivió una época llamada de oro

Hace apenas cinco años atrás, Rolando decidió ya no arrojarse al mar del risco más emblemático de todo Acapulco, pero sigue realizando actividades al interior de la asociación de clavadistas de Acapulco, porque esa es su pasión y su vida el mar y lo más alto de La Quebrada, donde cada vez que sube le vienen los recuerdos que vivió por 37 años de su vida.