Familias visitan el Panteón de La Leona en Día de las madres
La familia Castro Zavala recuerda con gran cariño y amor a su mamá, María Luisa Zavala de Castro
Maritza Cuevas
Durante la celebración del Día de las madres este 10 de mayo, uno de los lugares más visitados es el Panteón de La Leona, ubicado en la colonia Carolina de Cuernavaca, ya que familias enteras acuden al cementerio para recordar a las mamás y abuelas que ya han fallecido, llevándoles flores, adornando sus tumbas y pasando un momento de convivencia.
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Desde muy temprana hora y hasta entrada la tarde, las personas se dieron cita en el panteón para celebrar el Día de las madres, recordando con amor, cariño y mucha nostalgia a las mamás que ya no están. Algunas familias suelen llevar comida, botana y bebidas para festejar este día al pie de las tumbas; también llevan música, para escuchar aquellas canciones que las mamás solían disfrutar en vida.
Visitas desde Las Vegas, Nevada
La familia Castro Zavala visita la tumba de la señora María Luisa Zavala de Castro en el Panteón de La Leona, para celebrar el Día de las madres.
"Hoy es día de las madres y como familia es una tradición visitar a nuestra mamá, que falleció ya hace casi 19 años. Yo vengo desde Las Vegas, Nevada, y con mi hermana Teresa Castro y mis sobrinas estamos aquí para celebrar y recordarla", expresó Pablo Antonio Castro Zavala.
Asimismo, comparte que la señora María Luisa Zavala de Castro vivió gran parte de su vida en Cuernavaca y falleció en esta ciudad el 21 de mayo de 2006 a los 67 años de edad.
"Ella nació en La Barca, Jalisco, se crió en Mexicali, Baja California y llegó a Cuernavaca entre la década de los 40 y 50, se estableció aquí y todos mis hermanos y yo nacimos en esta ciudad".
Con alegría y música recuerdan la esencia de las mamás
La familia se reunió este día en la capilla que tiene la familia en este panteón para recordar a la señora María Luisa y celebrar el 10 de mayo, siempre con alegría, tal y como ella lo hacía en vida.
"Es un momento para venir a recordar a nuestra mamá, pasamos un rato, compramos algo para botanear o traemos comida; le traemos flores y en una bocina tocamos canciones que a ella le gustaban de artistas como Benny Ibarra, La Oreja de Van Gogh, Chayanne, Vicente Fernández y Juan Gabriel", comentó Teresa Castro Zavala.
Uno de los gratos recuerdos que tienen de la señora María Luisa es que en las mañanas solía cantar la canción de "Amigo" de Roberto Carlos con esa alegría que la caracterizaba.
Pablo menciona que su mamá es recordada por su familia y personas que la conocieron por ser una muy buena consejera.
"Una sobrina me llamó por teléfono hace un rato, y me dijo que recuerda mucho a mi mamá porque siempre tenía el consejo correcto para las personas, así como ese carisma y ángel para que la gente se acercara y confiara en sus consejos. A nosotros como hijos, el mejor consejo que nos dejó es que fuéramos buenas personas y que siempre nos portaramos bien", señaló Pablo.
Una tradición de todo el año...
La familia Castro Zavala dijo que la señora María Luisa solía ser muy alegre y disfrutaba de celebrar todas las fechas importantes del año, y ella inició una tradición de festejar cada fecha también en el panteón, para sentir de manera cercana a quienes ya no están, y solía visitar el cementerio y hacer celebraciones especiales como las posadas en diciembre.
"Cuando ella se fue, yo me quedé con esa tradición y siempre venimos en Navidad, Día de muertos, Primavera, San Valentín, etcétera, para continuar celebrando con ella", dijo Teresa Castro.
Los hermanos Teresa y Pablo destacaron que las flores favoritas de su mamá eran las rosas, la reina de noche y las llamadas ave de paraíso. Y señalaron que cuando falleció le dejó a Teresa una reina de noche que hasta la fecha conserva, y que es como símbolo de que en esencia y espíritu sigue con ellos y cuidando a su familia.
Finalmente, enviaron un mensaje a la sociedad en general, de disfrutar a las mamás quienes aún las tienen en vida, y celebrar con ella todos los días, abrazándolas y diciéndoles cuánto las quieren.
Es así como las familias recuerdan con amor a las mamás en este día tan especial, registrando una importante afluencia en este cementerio que es el más antiguo de Cuernavaca, pues data de 1885.