Hidalguenses van por el oro en el Festival Olímpico
Carlos Morales y Emilio Perea se clasificaron al pleito por el título nacional
Luis Carlos León
Exhibición de puños hidalguenses en Oaxtepec, Morelos. Carlos Morales y Emilio Perea, dieron una cátedra de puños este 4 de mayo y ambos púgiles se clasificaron a la final de sus respectivas categorías en el Festival Olímpico.
Domingo de medallas para el box hidalguense, pues los pugilistas Carlos Morales y Emilio Perea aseguraron su sitio dentro del podio de sus categorías en el Festival Olímpico de Boxeo, que se lleva a cabo en Oaxtepec, Morelos este cuatro de mayo.
El primero en encontrar su sitio entre los mejores del país fue Morales, quien tuvo su pelea semifinal antes del mediodía, ocasión en la que aspiraba a optar por un sitio en selecciones nacionales.
Vestido de pantaloncillo y camiseta roja, el originario de Tulancingo tuvo un férreo combate en el que buscó su sitio en la final del torneo.
En un primer round, el de estudio, Morales sacó mayor diferencia a la hora de encontrar el cuerpo de su rival, que respondía con intentos al rostro que esporádicamente encontraban destino.
Fue en el segundo en el que hubo mayor actividad en el intercambio de golpes y el hidalguense fajó una serie de impactos cuando el transcurso del capítulo estaba por la mitad de su duración, sin embargo, también recibió algunos impactos que propiciaron un pleito más parejo.
Ya en el final, Morales salió avante gracias a la mayor colección de golpes sobre su rival y destacó una serie de puños contra las cuerdas, que transcurrió segundos antes de la conclusión del pleito.
La diferencia entre ambos púgiles fue evidente, los jueces lo presentaron en las tarjetas tras darle el triunfo al hidalguense, quien buscará el oro el próximo martes.
En la función vespertina, fue Emilio Perea quien demostró el potencial que maneja en los puños y la decisión unánime fue la vía por la que se quedó con el pase al pleito por la medalla de oro.
Luego de un combate en el que el primer round fue parejo, Perea se desenvolvió mejor en el cuadrilátero, y a pesar de las ráfagas del rival, el hidalguense, quien vistió de azul, y fue más puntual a la hora de los contactos, que provocaron un par de conteos de parte del referí.
Con el pleito a su favor, el tercer episodio tuvo la misma tónica, en la que el representante de la entidad propició los golpes más efectivos, y orilló a que el rival se valiera de empujones y persecuciones para intentar nivelar, situación que finalmente no sucedió, para que Emilio opte por el cetro nacional de la disciplina.
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