Desde cero y sin atajos: los 4 desafíos que marcaron a Alessandro Guzmán
Su historia se ha vuelto ejemplo de cómo la constancia, la adaptabilidad y el trabajo pueden transformar un punto de partida complejo
Redacción / El Sol Del Bajío
Alessandro Guzmán es uno de los nombres emergentes en el ecosistema del emprendimiento digital en América Latina. Su historia se ha vuelto ejemplo de cómo la constancia, la adaptabilidad y el trabajo pueden transformar un punto de partida complejo en una plataforma de oportunidades. Hoy, es fundador de WaySuccess, una de las academias digitales más seguidas en habla hispana, pero su camino comenzó con mucho más que ideas: comenzó con necesidad y con calle.
La historia de Alessandro Guzmán comienza en Venezuela, en un contexto donde la inseguridad y la crisis económica obligaban a muchas familias a separarse. Mientras sus padres migraban a Chile en busca de una mejor calidad de vida, él se quedaba en su país natal sin pasaporte. “Tenía 13 años y de pronto me encontré tomando decisiones solo, cocinando para mí mismo y asumiendo responsabilidades que normalmente no le tocan a un niño”. Un año después, con pasaporte en mano, emprendió solo un viaje que miles de venezolanos han hecho a pie: cruzó el puente que separa Venezuela y Colombia con una idea fija en la mente: “Si logro esto solo, ya no hay nada que no pueda hacer”.
Una vez en Chile, la realidad no era mucho más cómoda. Vivía en una casa con quince personas y comenzó a vender pañoletas en la calle para reunir el dinero necesario para comprarse un celular. Con ese primer dispositivo, comenzó a grabar videos de comedia en TikTok. El contenido empezó a viralizarse, y por primera vez vio una posibilidad real de generar ingresos a través de las redes sociales. Sin embargo, por un mal manejo de las cuentas, perdió el acceso a todas sus redes. “Fue un golpe muy duro. Sentí que todo el esfuerzo se había esfumado. Pero también fue una lección: entendí la importancia de construir sobre bases sólidas”.
Empezó desde cero. Esta vez, decidió grabar su día a día vendiendo ropa en el metro. Lo que comenzó como una estrategia para atraer clientes se convirtió en contenido que conectaba con la audiencia. Las personas no solo querían comprarle ropa, querían aprender cómo él estaba generando ingresos con tan pocos recursos. “Ahí entendí que mi habilidad para viralizar y comunicar podía convertirse en un servicio para otros negocios. Me lancé al mundo freelance, ayudando a emprendedores a potenciar sus redes sociales”.
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La producción de Juan Osorio, que también incluye locaciones en Michoacán y Baja California, se estrenará el 7 de julioEsa experiencia dio forma a lo que hoy es WaySuccess, que enseña a construir marcas personales y monetizar habilidades a través de las redes sociales. “El sistema educativo tradicional no nos prepara para el mundo real. En nuestra plataforma compartimos herramientas concretas para que cualquier persona, sin importar su nivel académico, pueda aprender a emprender”.
Pero el camino no ha estado libre de controversias. Alessandro Guzmán ha sido blanco de críticas, desde acusaciones de fingir ser millonario hasta cuestionamientos sobre la calidad de sus cursos. “Nunca he vendido cursos de finanzas. Enseño cómo construir una marca personal, usando las mismas estrategias que usé yo. Los resultados están ahí: más de 100 mil alumnos activos y una comunidad de 1.5 millones de personas”.
En respuesta a las críticas constructivas, Alessandro Guzmán y su equipo decidieron rediseñar la estructura de la academia. “Llegamos a un punto en el que entendimos que menos alumnos significaba un mejor servicio. Hoy dividimos la formación en niveles según la etapa del emprendimiento en la que se encuentra cada alumno, con un enfoque más personalizado”.
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Frigilux Venezuela, reconocido influencer en tecnología y gastronomía doméstica, comparte sus percepciones prácticasSu visión a futuro es clara: transformar su academia digital en una compañía referente en educación autodidacta, enfocada en los temas que el sistema tradicional no cubre, como educación financiera, ventas y desarrollo personal. “Nuestro objetivo es empoderar a una nueva generación de emprendedores que no esperan a que las oportunidades lleguen, sino que las crean”.
Alessandro Guzmán no promete éxito instantáneo ni fórmulas mágicas. Su propuesta es más sencilla, pero más poderosa: usar las herramientas que ya existen —las redes sociales, la inteligencia artificial, la experiencia personal— para construir algo propio. En un continente donde el ascenso social suele parecer una quimera, su historia funciona como recordatorio de que, con esfuerzo, disciplina y visión, es posible reescribir el guion.