Banxico ve mayor probabilidad de recesión en México por incertidumbre

El banco central advirtió que la debilidad económica del país prevalece desde el año pasado, derivado de una contracción en la inversión

Recesión — Banxico prevé que el balance de riesgos para la actividad económica se encuentra sesgado a la baja / Ilustración: Daniel González

Miguel Ángel Ensástigue / El Sol de México

En medio de las tensiones comerciales con Estados Unidos y presiones inflacionarias por la imposición de aranceles, la probabilidad de una recesión en el país aumentó, indicaron miembros del Banco de México (Banxico).
A través de la minuta de su última decisión de política monetaria, los integrantes del banco central advirtieron que la debilidad de la economía ya estaba latente desde finales del año pasado, principalmente por una contracción en la inversión.
“La mayoría señaló que se prevé que la economía mexicana muestre un mayor grado de holgura en el horizonte de pronóstico. Algunos advirtieron que la probabilidad de que México esté entrando en una recesión ha aumentado”, según la minuta difundida por el banco central.
Hasta ahora, Banxico prevé que la economía mexicana crezca solo 0.6 por ciento en este año, aunque analistas privados consultados por la institución estiman un avance de 0.5 por ciento.
Las probabilidades de recesión por parte del banco central se asemejan a las proyecciones de otras organizaciones que prevén el mismo escenario, como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que espera una contracción del PIB de 1.3 por ciento este año y de 0.8 por ciento en 2026.
En tanto la agencia calificadora Fitch Ratings prevé que la economía mexicana no avance al cierre de este año y el siguiente solo contempla un desempeño de 0.8 por ciento.

La única visión optimista sobre la economía mexicana proviene de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que espera un crecimiento de entre 1.5 a 2.3 por ciento, mientras que para 2026 estima un avance de entre 1.5 a 2.5 por ciento.
Pese al aumento de probabilidad de recesión, Victoria Rodríguez Ceja, gobernadora de Banxico, aseguró que la economía mexicana se mantiene sólida y resiliente para enfrentar choques externos provenientes de la incertidumbre financiera actual.

“Si bien por supuesto estamos viviendo, como el resto del mundo, incertidumbre por las políticas comerciales que está implementado Estados Unidos, sin duda nuestra economía es fuerte y resiliente”, aseguró la banquera.
Al comparecer ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Senadores, Rodríguez Ceja sostuvo que el país tiene un marco macroeconómico sólido que permitirá afrontar los retos actuales que se presentan a nivel global.

Parte de las fortalezas de la economía son un régimen de tipo de cambio flexible, reservas internacionales por casi 240 mil millones de dólares, un sistema financiero bien capitalizado y la propia autonomía de Banxico, lo cual permite que el banco solamente se centre en su mandato central que es procurar la estabilidad de precios.

“Nuestro país se compara de manera favorable con economías similares en el marco que tenemos. Nuestra economía cuenta con solidez y resiliencia sólida que es lo que nos ha permitido y permitirá afrontar los desafíos que se presenten”, apuntó Rodríguez Ceja.

Destacan riesgos para la inflación

Para la mayoría de los miembros de Banxico, el balance de riesgos para la actividad económica se encuentra sesgado a la baja, al tiempo que se ha acentuado ante el entorno de incertidumbre y de tensiones comerciales.

Al respecto, señalaron que los riesgos asociados a la política comercial de Estados Unidos tendrían repercusiones tanto al alza como a la baja para la inflación, al igual que para la actividad económica de México.

“Algunos mencionaron que ante la imposición de aranceles es de esperarse que los precios de las mercancías importadas se incrementen debido a la depreciación de la moneda”, resaltaron los miembros de Banxico a través de la minuta.

Según el documento, en el corto plazo, la mayoría de los integrantes consideró que ha aumentado la incertidumbre y que este tipo de choques suele dificultar la toma de decisiones económicas, propiciando volatilidad financiera, que a su vez provoca mayor aversión al riesgo y endurecimiento de las condiciones financieras globales.