Ciudad Juárez se identifica en gran parte por ser la cuna de la industria manufacturera de exportación, identificada como maquila, lo que determina que con frecuencia lleguen a estas empresas ejecutivos de alto nivel de diferentes corporativos mundiales, que al regresar a sus empresas hablan de lo que encontraron aquí.
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Desgraciadamente la buena imagen que pudiera mostrarles nuestra ciudad no se puede observar en algunas zonas y parques industriales, donde lo que más se observa son infinidad de baches, que no se formaron a raíz de la última lluvia, sino que ya tienen meses e inclusive años de estar ahí.
Tal es el caso del Parque Industrial Río Bravo, ubicado en Waterfill, al oriente de la ciudad, en donde la calle principal, que comunica al lugar con la entrada al puente internacional de Zaragoza, muestra pésimas condiciones.
El parque fue comunicado a través de una gran avenida a la que se le dio el nombre de Clara Fuentes, que sí se encuentra en buenas condiciones, pero al ingresar por la avenida Waterfill las cosas cambian drásticamente.
En este parque industrial operan alrededor de 10 plantas de diferentes corporativos, entre los que se encuentra Lear Corporation, al lado de la cual por cierto se encuentra un lote baldío en el que se observan grandes cúmulos de tierra y basura.
También están Tatung, EDI, Compañía Armadora, Firstronic, Kingston Logistics, Aptiv, MGS Plastics, y Bosch.
En estas plantas, de acuerdo con un estudio del Instituto Municipal de Investigación y Planeación, se estima que laboran más de 5 mil 700 trabajadores.
El parque, según la misma fuente, tiene una superficie de 122.7 hectáreas y es, junto con el Antonio J. Bermúdez uno de los más antiguos de Ciudad Juárez.
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