María Cristina Martínez Zorrilla, de 85 años, con problema físicos que le impiden erguirse a plenitud, pero que goza de excelente visión y de dentadura envidiable, es beneficiaria del programa Alta Vulnerabilidad, bajo el cual en breve ya podrá habitar su primera vivienda propia, gracias a las acciones del gobierno municipal, cuyos servidores públicos rescataron su caso de un sinfín de expedientes no atendidos en el bienio 2018-2019.
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Visitada en la actual finca que habita, la cual fue de sus padres, en la calle Sinaloa 505, donde siempre ha vivido, Titina, como cariñosamente es conocida por muchos, esta mujer irradia su deseo de vivir muchos años más.
A su edad, su excelente visión le permite aún ensartar agujas para coser y remendar su vestimenta y la de sus hijos.
Por su carácter y actitud ante la vida, es querida por muchas personas que por mucho tiempo la han apoyado con alimentos, dado que apenas hace un unos años dejó de trabajar, labor que nunca le dio lo suficiente para rehabilitar la vivienda heredada.
Dice ella: ¨Me dedique siempre al trabajo, apenas aprendí a leer y escribir, pero eso no me impidió ser buena administradora de lo poco que ganaba¨, lo cual permitió salir avante con sus hijos, propios y adoptados, pero lamenta, nunca pudo invertir en rehabilitar la casa donde siempre ha vivido.
Con un sinfín de imágenes religiosas, fotografías de sus hijos y cosas y artículos que le recuerdan a otros consanguíneos y sentada en el borde de su cama dice: ¨Te reto a que ensartes una aguja…” Ella ganó, todavía sirvo, aunque de repente me fala la memoria, a ti si te conozco, eres (…). Hazme un favor, dile al presidente que me visite, quiero platicar con él, me dicen que es nativo de Ahumada, no lo ubico bien y quiero conocerlo para agradecerle lo que está haciendo por mi y mi familia.
¨¨No soy malagradecida, quiero pedirle una cosita mas al presidente, que antes de que ocupe los cuartos que me construyen, fumiguen los cuartos nuevos y aquí (donde vive), mi cama es nueva, no quiero llevarme animalitos entre las cosas que no desecharé, también quiero me diga el presidente, -que dice la gente es muy joven-, me diga de quien es hijo, conozco amucha gente, a lo mejor su mamá y papá son amigos¨.
Dado que la mujer es dicharachera en exceso, tuvimos que interrumpir la charla, luego de haber manifestado que la acción del gobierno no tiene precio y por tanto ella encomenará a Dios y a todos los santos a la gente del gobierno.
Para confirmar como s entregará la vivienda a Titina, como prefiere que le digan, integrantes el comité de obras, precisó que totalmente terminada, es decir con ventanas puertas y muebles del baño con regadera, todo excepto cerámica.
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