Reducen en JMAS y banco local la presencia de personal durante horas de trabajo, no así en el Municipio, donde implementarían este tipo de acciones durante la segunda fase establecida por el gobierno federal para enfrentar pandemia por coronavirus.
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En la única institución bancaria de Villa Ahumada sólo se trabajó ayer con una ventanilla abierta, por ende una cajera y sin subgerenta, aunque no se explicaron causas, todo indica que es medida preventiva, porque lo mismo sucede con clientes, quienes deben esperar, hacer fila en la vía pública e ingresan de dos en dos para que dentro no haya más de cinco personas.
Dicha medida, aunque alarga en mucho el tiempo de espera para operaciones en ventanilla, es bien aceptada por usuarios e intendente del banco, quien también permanece al exterior cuando hay clientes.
En JMAS, también se observó menos personal administrativo y de atención al público, aunque en esta dependencia no son comunes las aglomeraciones, como se ha corrido la voz que hay que evitar la presencia de mucha gente al exterior, usuarios respetan tal decisión, consignaron algunos consultados y empleados operarios.
Usuarios acatan bien la sana distancia, al no acercarse más de un metro al personal, esto en parte por la valla colocada, pero también por cierto temor a contraer coronavirus, opinó adulta mayor luego de haber pagado su recibo.
A otros empleados de la dependencia, en su mayoría operarios que igualmente tienen cierto contacto con la población, aunque recibieron cubrebocas y guantes no los utilizan, excepto cuando están dentro de las oficinas de la dependencia.
En tanto, en oficinas municipales el número de empleados y la actividad continuaba normalmente espera de lo que habrán de hacer cuando se ponga en marcha la segunda fase de las acciones federales, informó el secretario de Ayuntamiento.
“Por el momento, no es necesario reducir el número de burócratas en oficinas, excepto si alguien tienen problema de salud, se regresa a su casa”, explicó el funcionario.
Puntualizó que en caso de que haya necesidad de reducir el número de empleados, solo se mantendrían los de oficinas esenciales, como Catastro, Tesorería y Registro Civil y, de ser necesario en un, momento dado, tampoco las de esta última oficina, en cambio solo acudirían cuando haya necesidad de algún trámite, es decir, desde la recepción se le avisaría a la titular o colaboradora su presencia para atender al público y se retiraría.
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