Aproximadamente fueron 300 migrantes de diferentes nacionalidades los que llegaron este lunes arriba del tren cerca de las 9:00 horas a Ciudad Juárez.
El tren se detuvo a la altura de la Fiscalía General del Estado en el Eje Vial Juan Gabriel, y a partir de ahí, se bajaron y continuaron su ruta hasta el muro fronterizo.
"En sí nosotros queremos aplicar el presidente de aquí, que uno podía transitar libremente, sin necesidad de estadía, queremos pasar sin meternos en problemas con nadie", dijo Antonio Sedial. Él viajó con su hermano Luid, hasta Ciudad Juárez, duraron aproximadamente dos días y medio en el tren.
"Tomamos el tren cerca de la Ciudad de México, si nos tocaron retenes pero no eran los de migración eran policías y soldados pero no nos dijeron nada", platicó Antonio.
Indicaron, que durante el camino les tocó mucha gente buena que los apoyó con comida y agua. Sin embargo, también les tocó gente muy "déspota" como ellos los llaman.
"Venimos de Venezuela, llevamos dos meses desde que salimos, aquí en el sur de México es donde sí nos tocó duro, ahí se ponen muy estrictos y hay que rodear y caminar mucho", contó el venezolano.
Comentaron que ellos revisaron algunas leyes de migración y vieron cómo en repetidas ocasiones el Presidente Andrés Manuela López Obrador, mencionó que en México el tránsito para el migrante es libre.
"Nosotros no venimos a robar, ya si la gente nos regala comida, ropa y agua con eso tenemos, no venimos aquí a hacer mal a nadie", puntualizó el migrante, quien iba directo al muro fronterizo a intentar cruzar.
Su meta, como la de todos los migrantes, es llegar a Estados Unidos, pero si no se puede, contemplan quedarse en México.
"Dicen que no es bueno quedarse aquí, pero no hay que generalizar, hay gente buena y mala, nosotros siempre acompañados con Dips solamente", finalizó Antonio.