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Sin tener alguna explicación, y sin poder ser atendida en la Comisión Federal de Electricidad(CFE), Juana Guillermina Sánchez, busca la manera de pagar el cobro injustificado que ahora le llegó en su recibo de luz.
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Desde hace 16 años Juana está viviendo en una pequeña casa ubicada en la calle Cienegillas de la colonia Héroes de Nacozari, donde habitualmente pagaba recibos que oscilaban entre los 90 a 300 pesos, sin embargo esta vez su recibo excedió, pues el cobro le llegó de 3 mil 932 pesos.
“Yo no sé leer, ni escribir, pero cuando vi el recibo se me hicieron muchos ceros, pero nunca me imaginé la cantidad que sería hasta que le pregunté a un señor que estaba en la luz”, señaló.
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Ella acudió el martes a la CFE, llevaba una cantidad aproximada a los 300 pesos, ya que por lo regular nunca se había excedido de esa cantidad durante todo el tiempo que lleva viviendo ahí.
Sin embargo, al momento de querer pagar, fue rechazada, pues lo que llevaba no era ni una cuarta parte de lo que tenía que pagar.
La casa de Juana no cuenta con grandes lujos, su hogar se conforma con lo básico y los únicos aparatos eléctricos que pudieran gastar más luz son el refrigerador, una televisión pequeña y la lavadora, puesto que, no cuenta con muchos muebles, por ello la intriga e impotencia de saber porque esa cantidad.
“Yo pregunté que cómo era posible que me llegara esa cantidad tan alta, si yo soy pobre, no tengo computadora o muebles que me hagan a gastar mucha luz, eso es injusto, traté de arreglarlo de pedir que me explicaran, pero de manera déspota solo me dijeron que era lo que había consumido y tenía que pagarlo”, explicó con enojo.
Ella vive sola, y su único sustento es la venta de raspados y segundas que solía poner a fuera de su casa, pero ante la contingencia se vio obligada a no salir, además de que no se le vendía.
“La última vez que puse mis segundas, no saqué ni diez pesos, qué voy a hacer ahora que no tengo trabajo, no tengo dinero para pagar esta cantidad tan grande, aquí hay gente colgada, porque a ellos no vienen y los descuelgan”, recalcó.
Hasta este momento, Juana no ha encontrado una solución para liquidar esta deuda que ella asegura no corresponde a su consumo, sin embargo no le han dado de otra opción más que pagar.
“No me quedará de otra más que pedir prestado, pero esto no es justo, menos ahorita que no hay dinero, da mucho coraje”, expresó.
Por último, dijo que será en estos días cuando vuelva a presentarse en la CFE para pedir que por lo menos le den más tiempo para poder juntar el dinero que requiere para liquidar ese recibo.
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