Ciudad Juárez, Chihuahua.- Los migrantes mexicanos y centroamericanos que a diario son deportados por esta frontera denunciaron una serie de robos y abusos por parte de elementos de la Patrulla Fronteriza.
“Daniel”, originario de Zacatecas, fue deportado al medio día del domingo por el Puente Internacional Santa Fe.
El hombre cruzó la frontera por Santa Teresa, donde fue detenido por autoridades americanas y llevado por una semana a una cárcel en Nuevo México.
“Cuando cruzamos, nos quitaron todo, celulares, identificaciones y dinero, nos dijeron que cuando nos deportaran nos iban a regresar todo pero hoy que llegamos aquí nos damos cuenta de que nos robaron nuestros teléfonos, solo nos dejaron las identificaciones”, dijo.
Afuera de la oficina del Instituto Nacional de Migración (Inami), localizada en ese cruce, aseguró que además de los robos, fueron maltratados por personal del CBP en El Paso, Texas.
“Toda la noche nos tuvieron sin dormir, con frío nos tuvieron como si fuéramos pollos en congelador, nosotros ya pagamos nuestra sentencia y queríamos ser deportados por el trato que estábamos recibiendo”, agregó.
Ayer antes de ser deportado, autoridades americanas le entregaron un número a donde debe de comunicarse para poder reclamar su celular, el cual asegura tiene un costo mayor a los 4 mil pesos.
“Nos dicen que cuando estemos en nuestras casas llamemos al Consulado Americano para que nos envíen nuestro teléfono. A todos los mexicanos deportados y centroamericanos nos está pasando lo mismo, se están quedando con los teléfonos y muchos ya no los reclaman”, comentó.
“Daniel”, buscaba cruzar a Estados Unidos para encontrar un buen trabajo y poder mantener a sus hijos y esposa, quienes se quedaron en Zacatecas.
Después de la experiencia que pasó asegura que se regresará a su lugar de origen para buscar un empleo.
“Yo me voy con mis hijos y mi esposa, es muy feo el trato que te dan, nos tratan como si fuéramos ladrones y como ellos queremos un mejor futuro, es todo”, señaló.
Otro migrante de nombre Juventino y originario de Puebla, denunció a El Mexicano, que además de quitarle sus identificaciones y celular, autoridades americanas, lo despojaron de artículos como cinto, cartera y agujetas de los zapatos.
“Es la segunda vez que cruzo por Santa Teresa, me acaban de deportar y ni siquiera he pagado la otra mitad que debía. ¿Cómo le voy hacer ahora, si ya no hay nadie que responda por mí? Nos quitan todas las ilusiones de encontrar un mejor futuro”, dijo Juventino.
El sábado fueron 98 migrantes mexicanos que antes de medio día fueron deportados por el Puente Internacional Santa Fe o Paso del Norte.
Ayer se observó a otro grupo de mexicanos y centroamericanos que fueron deportados por ese mismo cruce; cabe destacar que la mayoría decidió tomar camino por su propia cuenta y no acudir a albergues.
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