El gasto familiar a partir del confinamiento decretado por el gobierno federal para hacer frente al coronavirus provoca el incremento del gasto familiar para alimentación, sostienen abuelitas que se quedan al cuidado de los niños, mientras los padres que no perdieron el empleo trabajan y de quienes salen en busca de opciones temporales de ingreso.
RECIBE GRATIS EL NEWSLETTER DE EL HERALDO DE JUÁREZ DIRECTO A TU EMAIL; DA CLIC PARA SUSCRÍBIRTE
“Desde que la recomendación fue ‘quédate en casa’, la cual no ha funcionado al cien por ciento, porque trabajes o no hay que salir a buscar la vida, el gasto para alimentación se ha duplicado”, aseveraron abuelitas.
Consultadas mientras hacían tortillas de harina de trigo, una de ellas, que se identificó sólo como Adela dijo que desde que se ordenó la cuarentena compra el doble de huevo, de frijoles, de todo y por supuesto de harina para hacer tortillas; “los niños comen todo el día, aunque no hagan nada, pero a mí me ayuda el mayor de los nietos, entregando tortillas que me encargan”.
.JPG "manuel ruiz. olga casas (2).JPG")
Antes del confinamiento con un kilo de harina hacía entre 30 y 35 tortillas, hoy día, son 1.5 o 2 kilos de harina, aparte, a veces se compra un kilo de maíz para hacer tacos dorados, no se diga el huevo, los frijoles, se acaban el doble.
Buscar la opinión de las abuelitas se dio luego de que panaderos aseguraran que a partir de la contingencia la venta de pan blanco ha bajado hasta 70 por ciento, antes se hacían y entregaban ente 130 y 150 piezas en tiendas, ahora sólo piden entre 30 y 45 piezas y no se venden todas, en cambio la demanda de pan duce no ha variado.
La abuelita Adela reconoció que efectivamente su familia compra menos pan blanco, porque hacen más tortillas de trigo, pan dulce se compra cada tres o cuatro días, porque es más caro.
El nieto que ayuda a doña Adela entrega pedidos de tortillas y regresa para ayudarle a ella, indicó la adulta mayor.
Te recomendamos:
