Ciudad Juárez, Chihuahua.- Por una supuesta secrecía en el caso, ni la Fiscalía Especializada de la Mujer ni el Tribunal Supremo de Justicia, han brindado información sobre el lugar donde se encuentra recluido el padre Aristeo Trinidad Baca, detenido por el delito de violación y abuso sexual.
El clérigo de 74 años de edad fue detenido el pasado 9 de enero por agentes ministeriales gracias a una orden de aprehensión girada por un Juez, para permanecer recluido en el Centro de Reinserción Social Estatal No. 3 por más de 15 días.
Los abogados defensores alegaron que por motivos de salud y su avanzada edad, deberían de otorgarle prisión domiciliaria, petición que fue aprobada por el Juez Félix Aurelio Guerra Salazar la semana pasada.
Sin embargo, fue hasta la noche del 27 de febrero que fue trasladado a una vivienda asignada por el Tribunal Supremo de Justicia en acuerdo con el equipo de abogados del padre Aristeo, donde estará vigilado las 24 horas del día y además deberá de portar un brazalete electrónico.
Para la mañana del viernes, la vocera de la Fiscalía Especializada de la Mujer, Silvia Nájera, señaló que a dicha corporación no se le autorizó brindar ninguna información en torno al caso o la ubicación del cura.
Rosalba Salcido, del TSJ, no pudo proporcionar datos sobre el seguimiento del caso, el cual, conmocionó a la comunidad juarense al tratarse de una pequeña de 11 años violada en repetidas ocasiones por un representante de la Iglesia Católica.
Los hechos fueron denunciados por la madre de la menor en el 2018, sin embargo, dijo que la niña era violentada sexualmente por el clérigo de la iglesia Santa María de la Montaña, desde que tenía 8 añitos de edad.
Tanto la Red Mesa de Mujeres como el Instituto Chihuahuense Mujeres, criticaron la decisión de permitirle a Aristeo seguir su proceso desde su casa y no en el CERESO, como cualquier otro detenido por estos mismos delitos.
