Ciudad Juárez, Chihuahua.- El hacinamiento desmesurado de migrantes en Ciudad Juárez, ha tenido ya repercusiones en materia de seguridad, con por lo menos siete extranjeros detenidos por diversos delitos, entre ellos tres cubanos.
El caso más reciente, es el de Osvel N. R., detenido por la Fiscalía de Distrito al ser señalado como el asesino de su compatriota, Osmani Valdemira Pavón, en hechos ocurridos el 18 de julio en una vivienda de las calles Espejo y Globo, de la colonia Chaveña.
Otro de los casos que también llamó la atención pública, fue la aprehensión de otro cubano, señalado de haber violentado sexualmente a una menor en el Parque Acuático Anitas, el pasado 21 de junio, puesto en libertad un par de días después.
Los demás casos, son el de un migrante de la isla detenido en abril por falsedad de declaración, por la Fiscalía, así como el migrante de esta nacionalidad que era buscado por lesionar a cuchilladas a un supuesto asaltante en la Zona Centro, el 16 de junio.
Aunado a esta problemática, la noche del domingo, 48 isleños fueron asaltados a punta de pistola en el albergue de un Templo Bautista, de la colonia Francisco I. Madero, en las calles Francisco R. Almada y Ambrosio Figueroa.
Luis Naranjo, platicó para El Mexicano que tan solo en Ciudad Juárez existen 12 mil cubanos de los más de 40 mil que se encuentran en toda la frontera norte de México, según información que les ha compartido el Consejo Estatal de Población.
Él y otros 47 compañeros, fueron despojados de sus pertenencias por tres hombres, dos de ellos portando pistolas tipo escuadra y uno con un arma larga, que era el que les gritaba a los otros "que los matarán a todos".
Desde el pasado lunes, han estado acudiendo a la Fiscalía General en la Zona Norte para interponer las denuncias correspondientes en grupos de cuatro en cuatro, luego de haberse quedado sin pasaportes, documentos, dinero, ropa y el número de solicitud de asilo que les fue entregado por las autoridades norteamericanas.
Ante esta situación, la COEPO solicitó vigilancia durante las 24 horas al exterior del albergue, petición que fue atendida por la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, quienes mantienen una unidad vigilante sobre la calle Francisco R. Almada.
"Claro que tenemos miedo, pero que podemos hacer, a mí me dieron un cachazo en la nuca y nos decían que aquí vendíamos, no sé qué coño querían decir con eso, que podemos vender si vivimos en la miseria", gritó molesto Luis.
Pese a esto, aseguran que seguirán a la espera de su cita, ya que él, tiene que presentarse el 23 de diciembre y de no dársele el asilo, se quedará a vivir y trabajar en Juárez, porque dice ser un hombre de trabajo.