CULIACÁN. Ante la ausencia de policías por estar en evaluación, delincuentes del orden común aprovecharon la madrugada de ayer para cometer robos a comercios, saqueos, quema de vehículos y bloqueos viales en la capital de Sinaloa.
A pesar de la atención focalizada en materia de seguridad que Sinaloa recibe por parte de las autoridades federales, principalmente en Culiacán, la incidencia delictiva no se ha reducido desde el pasado 9 de septiembre, cuando se registraron enfrentamientos entre Los Chapitos y La Mayiza, facciones del Cártel de Sinaloa.
A primeras horas de ayer se recibieron alertas sobre tres robos de vehículos por parte de civiles armados en el bulevar Lola Beltrán, cerca de la Universidad Autónoma de Occidente (UAdeO) en Culiacán, y más tarde se reportó un bloqueo en el mismo bulevar con vehículos incendiados.
También se informó que en el fraccionamiento Valle Alto, una persona, con una retroexcavadora, intentó robar un cajero de Bancoppel, pero sólo logró derribar una barda, y en Plaza Barrancos, tres civiles armados asaltaron locales de ropa y calzado, además de que vandalizaron una tienda de teléfonos celulares.
Por último, en la colonia Buenos Aires, una agencia de motocicletas fue el objetivo de ladrones, quienes, a bordo de una camioneta sustrajeron 45 unidades. El crimen se cometió en un lapso de dos horas sin que llegaran las autoridades para tomar acciones, de acuerdo con los testigos.
Desde el pasado 25 de septiembre inició la revisión del armamento de la Policía Municipal de Culiacán por parte de elementos de la Sedena para verificar si se apegan o no a los lineamientos, lo que provocó que los agentes dejaran de patrullar las calles.
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Sinaloa es el territorio en disputa de dos grupos criminales: Los Chapitos y La Mayiza. El precedente que dio inicio a dicho conflicto fue la captura de Ismael El Mayo Zambada García, el pasado 25 de julio. El capo acusó a los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán de ser los autores de su detención.
Hasta el 9 de septiembre, la disputa se hizo visible al público con una serie de enfrentamientos que sembraron el caos y pánico en el centro del territorio.
Antes de que los sicarios se confrontaran, 600 elementos del Ejército mexicano arribaron en agosto. En julio también llegaron 400 efectivos de Fuerzas Especiales; sin embargo, no se ha contenido la incidencia delictiva.
Después de que Claudia Sheinbaum asumiera la presidencia de la República se informaron los detalles sobre las estrategias de seguridad, donde Sinaloa no fue incluido en la lista de estados más violentos. No obstante, el territorio recibió la visita de los titulares de las secretarías de Seguridad y Protección Ciudadana y de la Defensa Nacional, Omar García Harfuch y el general Ricardo Trevilla, respectivamente.
Tras la sesión, el gobernador Rubén Rocha informó de los acuerdos, entre ellos la implementación de un operativo de proximidad encabezado por la Guardia Nacional en parques, escuelas y centros comerciales con la participación de 590 efectivos; el reforzamiento de los trabajos de inteligencia para perseguir a perfiles clave del crimen organizado, y el aumento del personal militar en Navolato, Elota, San Ignacio y Culiacán.
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Óscar Sánchez, presidente de la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán, consideró que se pierden los límites de asombro con los hechos delictivos, donde los actos de rapiña y robos con uso de maquinaria habla de que el tema de la inseguridad está muy lejos de resolverse. “El sector comercial y económico padece las consecuencias de esta ola de inseguridad y al mismo tiempo de la capacidad de vigilancia de la policía preventiva al estar intervenida por la Sedena".
El representante de los locatarios agregó que ante la ausencia de policías de proximidad y vigilancia municipal hay un aprovechamiento de muchas personas para cometer delitos en Culiacán, y destacó que en un mes ya son más de 200 delitos contra actividades comerciales sin personas detenidas.
