/ lunes 18 de enero de 2021

Rehabilitación de quemados también fue interrumpida

Uno de los sobrevivientes regresó sin ser atendido por seguridad sanitaria del mismo nosocomio

La pandemia interrumpió la rehabilitación de dos adolescentes sobrevivientes a la explosión que ocurrió hace dos años en Tlahuelilpan. Incluso el menor, Alán, dio positivo a Covid-19 en septiembre y estando en el hospital Shriners de Galveston, Texas, Estados Unidos, lo regresaron sin atenderlo por seguridad sanitaria del mismo nosocomio.

Así lo informó la directora del área de Traslados de la Fundación Michou y Mao IAP, Ámbar Solís, quien refirió que tanto Alán como Emanuel, “ambos están estables, bien”, esperando que la contingencia sanitaria aminore para que se reabran los espacios en Tula donde reciben parte de su tratamiento con un aparato que les donó la Cruz Roja de México.

➡️ Mantente informado en nuestro canal de Google Noticias

Ellos dos sobrevivieron de cuatro pacientes que fueron remitidos a Galveston, a un centro médico especializado en infantes quemados donde no les cobran, gracias al convenio entre el gobierno de Hidalgo y la fundación que dirige Virginia Sendel.

La Cruz Roja de México les apoya en sus visados, tanto del herido en recuperación como de la mamá, mientras que la Fundación Michou y Mao les paga sus boletos de avión a Estados Unidos.

A Alán se le venció la visa en octubre y no puedo renovarla a tiempo porque la pandemia cerró las oficinas de trámites. Tuvo que viajar en septiembre a Gavelston por tierra, pero al llegar al hospital dio positivo a Covid-19 y ya no lo atendieron. Se regresó de inmediato.

Emanuel, quien ya cumplió 18 años, regresará en marzo a la clínica para una cirugía y valoración.

Parte de su tratamiento lo han podido recibir en la sede de Shriners en la Ciudad de México. Los dos continuarán su rehabilitación hasta que los den de alta, al cumplir cada uno 21 años de edad, dijo Ámbar Solís.

“Físicamente todavía usan sus trajes de presoterapia, con la cual se pretende que la cicatriz no se abulte y no limite su movilidad, en ambos casos”, detalló.

Una vez que abran la Unidad Básica de Rehabilitación en Tula, podrán acudir a recibir su tratamiento con ultrasonido para cicatrizar, “es como un masaje y disminuye la cicatriz”.

Ambas familias, de Tlaxcoapan y Tetepango, de donde son originarios los dos, pidieron privacidad para sus parientes y por ello no pudieron ser entrevistados.




Te recomendamos el podcast ⬇️

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Acast

Deezer

Amazon Music

La pandemia interrumpió la rehabilitación de dos adolescentes sobrevivientes a la explosión que ocurrió hace dos años en Tlahuelilpan. Incluso el menor, Alán, dio positivo a Covid-19 en septiembre y estando en el hospital Shriners de Galveston, Texas, Estados Unidos, lo regresaron sin atenderlo por seguridad sanitaria del mismo nosocomio.

Así lo informó la directora del área de Traslados de la Fundación Michou y Mao IAP, Ámbar Solís, quien refirió que tanto Alán como Emanuel, “ambos están estables, bien”, esperando que la contingencia sanitaria aminore para que se reabran los espacios en Tula donde reciben parte de su tratamiento con un aparato que les donó la Cruz Roja de México.

➡️ Mantente informado en nuestro canal de Google Noticias

Ellos dos sobrevivieron de cuatro pacientes que fueron remitidos a Galveston, a un centro médico especializado en infantes quemados donde no les cobran, gracias al convenio entre el gobierno de Hidalgo y la fundación que dirige Virginia Sendel.

La Cruz Roja de México les apoya en sus visados, tanto del herido en recuperación como de la mamá, mientras que la Fundación Michou y Mao les paga sus boletos de avión a Estados Unidos.

A Alán se le venció la visa en octubre y no puedo renovarla a tiempo porque la pandemia cerró las oficinas de trámites. Tuvo que viajar en septiembre a Gavelston por tierra, pero al llegar al hospital dio positivo a Covid-19 y ya no lo atendieron. Se regresó de inmediato.

Emanuel, quien ya cumplió 18 años, regresará en marzo a la clínica para una cirugía y valoración.

Parte de su tratamiento lo han podido recibir en la sede de Shriners en la Ciudad de México. Los dos continuarán su rehabilitación hasta que los den de alta, al cumplir cada uno 21 años de edad, dijo Ámbar Solís.

“Físicamente todavía usan sus trajes de presoterapia, con la cual se pretende que la cicatriz no se abulte y no limite su movilidad, en ambos casos”, detalló.

Una vez que abran la Unidad Básica de Rehabilitación en Tula, podrán acudir a recibir su tratamiento con ultrasonido para cicatrizar, “es como un masaje y disminuye la cicatriz”.

Ambas familias, de Tlaxcoapan y Tetepango, de donde son originarios los dos, pidieron privacidad para sus parientes y por ello no pudieron ser entrevistados.




Te recomendamos el podcast ⬇️

Spotify

Apple Podcasts

Google Podcasts

Acast

Deezer

Amazon Music

Policiaca

Padre de familia golpea a profesor frente a sus alumnos en Parral; menores entran en crisis

El hombre ingresó al salón de sexto grado donde frente a los alumnos comenzó a golpear al docente, aún se desconocen las razones de su proceder

Policiaca

Asesinan a balazos a un hombre en la Melchor Ocampo

Agentes de la Policía Municipal acudieron al lugar de los hechos para hacerse cargo de la escena del crimen

Juárez

UTCJ retomará visitas a las escuelas en Unidad Robótica Móvil

Aunque se acercaron directoras de instituciones educativas de El Paso y Phoenix para que acudan a escuelas, el rector puntualizó que la prioridad es Ciudad Juárez

Juárez

Canacintra promueve V-Business, para turismo empresarial

La membresía Combo Business de Volairis, elimina costos de reservación, otorga Priority Pass y adelanta el vuelo según disponibilidad

Juárez

La UACJ invita a la comunidad a la Fiesta de los Libros del 23 al 27 de abril

La inauguración oficial se llevará a cabo a las 10:30 de la mañana del 23 de abril en la Sala Oro del Centro Cultural de las Fronteras

Chihuahua

Colocan mantas en Juárez; culpan a "El Gallo" de ordenar ataques vs funcionarios del Cereso 1

Lorenzo Adrián, quien esta recluido en el Cereso 3, es acusado de haber ordenado el ataque al funcionario Nicolás Monárrez, donde él falleció y su hijo y escolta resultaron lesionados