Dentro de los meses de Abril y Mayo es posible que lleguemos a oler un cambio que se avecina y veamos manifestaciones de manera pacífica en diferentes estados de la republica mexicana en donde se representa un movimiento en pro del cannabis; en algunos lados como en la CDMX estos movimientos llevan más de XV años manifestándose de manera colectiva e independiente por medio de diferentes activistas.
A lo contrario de lo que se cree y se piensa, no se trata de que todos fumen cannabis, si no de reducir los daños bajo un consumo responsable. Se busca el alto a la persecución criminal del consumidor así como que también se busca que se le reconozcan como miembros activos en la sociedad y se les deje de estigmatizar socialmente bajo arquetipos pobres, tontos y burdos los cuales se empeñan en desacreditar al consumidor de cannabis cuando este es de un amplío perfíl socioeconónomico y cultural.
Para que el diálogo cannábico avance no basta con solo hablar de un posible mercado en torno a la planta, se debe de analizar los problemas arraigados alrededor de ella dentro de nuestra cultura para poder entender de mejor manera el tema, pues tiene que ver con derechos humanos al libre desarrollo de la personalidad sin lastimar a otros, es identidad, y no por que fumar te de identidad sino por que en nuestro país la planta de cannabis se mete a la cosmogonía de los grupos originarios, le llaman “Santa Rosa”, por la zonas de Hidalgo, (Williams-García, 1975), estos datos sobre el uso de la Santa Rosa también nos lo hace saber la antropóloga Lourdes Ramírez (2017), quién ha investigado a grupos dentro de la Sierra de Hidalgo, en especial a la comunidad “hñähñu” y su cosmogonía.
Es un tema de diversidad de estilo de vida. Se fomenta el auto cultivo como una alternativa al acceso a un producto de cannabis de mayor confiabilidad para consumo personal, o terapéutico y evitar ser participe así como evitar exponerse dentro del mercado negro. Se ejerce el derecho al libre desarrollo de la personalidad tal y como lo reconoce La Suprema Corte de Justicia de la Nación (2018) , al mencionar la inconstitucionbilidad en la prohibición absoluta del cannabis, reconociendo los derechos de los consumidores cannábicos.
Cuatrocientos veinte, ¿Qué tiene de especial este número?, Es un dígito que pasa a ser un símbolo e ícono visual asociado a la comunidad cannábica a nivel mundial con sus famosos dígitos “420”, número inmortalizado por “ Los Waldos” (1970), un pequeño grupo de estudiantes de una escuela de San Rafael, California en Estados Unidos. La historia detrás de ello es que estos jóvenes se habían dado cita a las 4:20 pm. con un mapa que detallaba el camino a un cultivo de cannabis, el cual nunca encontraron. Es así como se da la adaptación del número cannábico en la cultura popular americana para después propagarse y adaptarse a nivel global, sin embargo el día del activismo en pro de la despenalización del cannabis se da el primer fin de semana del mes de mayo, en este año será el 6 de Mayo.
Antecedentes:
El lenguaje es fuerte ya que crea imaginarios y convicciones que tardan generaciones en caer. Una posibilidad del miedo y la relación del un consumidor de cannabis que ayuda a crear el imaginario de un marihuano violento podríamos hilarla con la palabra “asesino”, la cual tiene sus raíces en la palabra “ hassassin”, la cual a su vez significa “bebedor de hachis” o “fumadores de hachís” y se le relaciona a un grupo elite de soldados sanguinarios chiitas.
La palabra “marihuano” es comúnmente usada para referirse al consumidor de cannabis de manera despectiva con la intención de desacreditarlo de alguna manera ante la sociedad al intentar relacionarlo con adjetivos como “pobre”, “violento”, “feo”, “cholo”, entre otros tantos, sin embargo esta palabra de “marihuano” como tal no viene referida en la Real Academia Española (RAE). ¿Por que aún se le intenta estigmatizar al consumidor de cannabis?, esto tiene que ver por el estigma social, teoría en la cual Irving Goffman (2006),nos relata que esta se deriva a partir de los griegos y que contiene 3 ejes bases los cuales son: diferencias de la religión, deformaciones del cuerpo y por diferencias entre la “raza”, bajo estas diferencias se crea el concepto del “otro” y este a su vez se le llega a ver como una amenaza dentro de algunas teorías sociales creando imaginarios colectivos que llegan a reflejar el miedo hacia el desconocido.
Antes de continuar hay que hacer una reflexión en este concepto de la otredad y entender la manera en la que la planta del cannabis llega no solo a nuestro continente, si no poner atención en la parte sociocultural en cómo se arraiga dentro de la cultura mexicana de una manera singular. El periodista cannábico Juan Pablo García Vallejo nos ayuda a entenderlo en su libro La historia de la marihuana en México 1492-2010.
Es a partir de la llegada de los navíos del génoves Cristobal Colón que esta planta llega al continente americano. Ellos cargaban la planta de cannabis en sus incursiones en alta mar, no por que la fumasen sino porque era utilizada por su fibra textil para poder crear sogas y parches de las velas de los barcos.
Después el cannabis pasa a ser adopotada bajo practicas medicinales por medio de las plantas de poder que encontramos dentro de la medicina herbolaria por parte de los grupos originarios de nuestro país, un ejemplo de su uso es una bebida que le llamaban “pipiltzintzintli”, este brebaje también era conocido como “los niños venerados”.
Pasando algunos siglos la costumbre del uso medicinal de esta planta llega a la ciudad de México la imagen del consumidor que fumaba de manera recreativa marihuana dentro de la cotidianidad; “léperos” les llamaban, García Vallejo los identifica dentro del Barrio de La Merced en la Ciudad de México. La antropóloga Ana María Prieto (2005), los identifica como los hombres pobres de las ciudades quienes trabajaban principalmente las minas, el campo y otro obrajes dentro del siglo XVIII y XIX así como también los identifica dentro de la epoca de la independencia, son miembros de los resultados de las castas, por ende distinto al indio como tal.
El cannabis se arraiga de manera socio cultural empezando con los indigenas, luego pasando con los soldados ya fuesen federales o revolucionarios, mas adelante el cannabis llega a pasar con los artistas empezando con los poetas, luego con grandes pintores mexicanos como Diego Rivera, Frida Khalo, e inclusive llega a la gráfica popular por medio de Guadalupe Posadas, creador de La Catrina, refleja el tema cannábico en la interpretacion de su personaje Don Chepito “el marihuano”.
Los personajes cannábicos también llegan a ser representados en el cine mexicano, desde Tin Tan quien hacía referencias a “la hierba” en diferentes películas, hasta llegar al cine contemporáneo por medio de “los charolastras” de Diego Luna y Gael García, sin olvidar la representación actual de personajes contemporáneos que abren el espectro del perfil representando a algunas señoras en personajes como los que interpreta Verónica Castro en la serie La Casa de las Flores en Netflix.
Sin duda no podemos pasar de largo que al ser un país resultado de un mestizaje debido a una conquista y colonia algunos valores y acciones se intentan replicar para pertenecer a las nuevas altas esferas sociales dando como resultado un repudio a sentirse de clase baja u obrera bajo la ensoñación de ser superior en algo al otro. Esto detona discursos sociales e imaginarios colectivos. Se estigmatiza mucho a través de la religión y la raza en nuestro país, también hay una estigmatización social con base al estatus social de las personas, clasismo.
¿Qué tienen de relación el estigma social del mexicano con el personaje del marihuano?, Por un lado el mexicano llega a ser estigmatizado por algunos, como lo podemos evidenciar en la postura estadounidense al querer considerar al mexicano como “flojo”, “borracho”, “marihuano”, “inpuro de raza”, “violento”, e incluso hasta como “violadores”, esto ultimo mencionado por el ex mandatario de los E.U.A, Trump.
En algunos casos vemos como estas posturas son utilizadas en su intento en señalar al consumidor de cannabis de manera despectiva creando un monstruo en un imaginario social en donde se descarga este odio en para ver estas relaciones es necesario hacerlo de manera visual utilizando la semiótica y la semántica para leer algunas imágenes, en donde pondremos un enfoque en analizar la vestimenta de los personajes presentados, su color de piel y el contexto de donde son fotografiados.
¿Pero de dónde nace este imaginario? Tomamos de referencia la escultura de “El pensamiento” Romulo Rozo (1930) y la historia en como una broma durante una exhibición la cual constaba en colocar una botella de tequila o mezcal a los pies del personaje de la escultura dando como resultado la imagen icónizada y popularmente conocida como “el mexicanito borrachito”.
Estas maneras de querer desacreditar al mexicano son de gran similitud en como se intenta de estigmatizar y señalar al consumidor de cannabis al querer relacionarlo con los sectores pobres y obreros señalándolos de manera despectiva con base a diferencias raciales y socioeconómicas, temas de discriminación.
La jerga alrededor cannábica en México llega a ser muy colorida y folclórica, es divertida en su naturaleza, una juguetona expresión para pasar desapercibido ante aquellos quienes ignoran esta realidad, desde la caquita de chango, la colita de borrego, el zacatito para el conejo, la kushara, el cafe, la mostaza, hasta quemarle las patas al diablo o prenderse un gallo.
Otro ejemplo de esta manera singular de jugar las palabras para referirse a la planta de cannabis lleva a que nazca la palabra “marihuana” como tal en nuestro país, su etimología es de México para el mundo, esta palabra viene del asociar en su momento el cannabis con curanderas y vendedoras de los mercados, esta relación de nombres de “Marías y Juanas” que usualmente eran utilizados para referirse a las señoras indígenas la podemos ver con la famosa María Sabina, curandera mazateca.
“La Grifa” se relaciona al consumo alto de cannabis, pero esto es por Guadalupe Rivas Cacho, actríz mexicana de teatro quien interpretó a un personaje basado en una señora en situación de calle a quien le apodaban “La Grifa” y era conocida por fumar cannabis; La palabra de “grifo”, significa estar bajo los influjos del alcohol y/o de la marihuana, (RAE), y traer el pero enmarañado, algo que evidenciaba la combinación de razas; esta palabra también nos hace referencia al soldado zapatista Antonio Barona quién era conocido por su hábito de fumar marihuana, y era también reconocido por llevar acabo hazañas bastante complicadas en contra del ejército federal, así lo menciona Pérez Montfort (2016).
Ola verde: Problemas actuales alrededor del cannábis en México
Hay una falta de actualización por parte de las autoridades en cuestión al tema, esto siendo sesgado por una postura moralista, conservadora y mayormente religiosa mediante las cuales se niegan a reconocer el derecho a los terceros solo por pensar que no deberían de hacer ciertas costumbres personales.
La estigmatización social al consumidor sigue siendo factor para un diálogo lento, aún se le intenta desacreditar por parte de algunas personas. A pesar de que en 2015 se da el primer amparo en favor de la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Responsable y Tolerante marcaran un camino a la jurisprudencia las autoridades no están actualizadas en estos cambios dentro de algunos artículos dentro de la ley general de salud y por parte SCJN lo que conlleva a que aún siga problemas de extorsión por parte de alguna autoridades y persecución por parte de algunos funcionarios públicos junto con la negación de ampliar el diálogo, y mucho menos por parte de los centros dedicados a tratar el tema de adicciones quienes sin importar la sustancia tratan a todos por igual cuando es necesario conocer los contextos de cada sustancia, en ocasiones estas actitudes vulnerabilidad a los internos, llegan por consumo de cannabis y se asocian con personas que consumen piedra, hielo, o chiva. El Cannabis No es una ventana a otras drogas duras como antes se creía, esto nos lo hace saber el Departamento de Justicia de los Estados Unidos de América.
Jugosas promesas: La estafa de Juicy Fields y el caso de un bigotón.
La falta de reglamentaciones da oportunidad a fraudes por parte de gente “emprendedora” quien se aprovecha de la falta de información y de legislación, un ejemplo de ello es la empresa Juicy Fields, empresa alemana dirigida por Paul Bergots. Esta empresa operaba a nivel mundial incluyendo en México, en donde su modus operandi era una estafa que consistía en la inversión de dinero para tener derecho a cosecha de cannabis la cual se le pagaba al inversionista una cantidad y el resto era parte de la compañía para su venta. En CDMX Juicy Fields se anunciaba como patrocinador en un programa llamado Tiempo de Cannabis, (2021), entre otros proyectos cannábicos dentro de territorio nacional.
El 13 de Abril dentro de la mañanera del presidente López Obrador dieron los datos de haber encontrado irregularidades en 65 licencias expedidas a Vicente Fox y algunos cercanos. El ex mandatario mexicano representaba la bandera del partido del PAN, mismo partido que contaba entre sus líneas a Genaro Luna como encargado de seguridad nacional y ahora arrestado en Estados Unidos y declarado culpable de narcotráfico y crimen organizado.
