Pese a que muchos negocios han cerrado sus puertas o reducido su actividad al mínimo, los recibos de servicios como la energía eléctrica no dejan de llegar, lo que viene a agravar la situación de cientos de micro y pequeñas empresas que al estar paralizadas han dejado de percibir ingresos, dijo Jesús Manuel Salayandía, presidente de la delegación local de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra).
Dijo que los empresarios están de acuerdo con cumplir con los pagos que tienen que realizar, pero debe ser bastante más bajo hacerlo cuando las empresas están totalmente cerradas.
Desde el inicio de la crisis económica actual se buscó la manera de contar con un tratamiento diferente por parte del gobierno federal, en todos los sentidos, inclusive en lo fiscal, pero nada de esto se ha conseguido, recordó.
Lo señalado por Thor Salayandía coincide con los recibos por consumo de electricidad de una empresa local que mostró un recibo mensual que llegaba, antes de iniciar la cuarentena, por un poco más de 15 mil pesos, para dentro de ella superar los 16 mil en un recibo y los 20 mil en otro.
Esto quiere decir que en lugar de reducirse, si se toma en cuenta que en la empresa solo se manejaron guardias mínimas de personal, tendió a subir, sin que esto haya tenido que ver con algún aumento en las tarifas regulares.
De acuerdo con información de la empresa en cuestión, se acudió a las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), donde la explicación fue en el sentido de que la lectura pudo haber sido estimada, porque la empresa estaba cerrada; el lugar sigue abierto, con personal de guardia.
El dirigente empresarial indicó que para el sector industrial se manejan varias tarifas que es lo que provoca que los consumos sean muy altos o que bien pudieran no ser medidos, sino estimados.
Este tipo de situaciones seguramente se van a presentar en muchas empresas que van a enfrentar problemas al retornar a la actividad, si es que lo hacen.
El dirigente empresarial afirmó que los cobros llegan puntuales y altos a las empresas, lo que agrava su situación económica y dificulta que se mantengan activas.
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