En medio de una crisis que apenas comienza para la micro, pequeña y mediana industria, proveedores del sector maquilador proponen a sus clientes que modifiquen sus sistemas de pago y, en lugar de esperar un mes, dos y hasta tres, para cubrir el pago de sus facturas lo hagan en este tiempo.
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Así lo señaló el presidente de Desarrollo Económico del Norte, el empresario Héctor Núñez Polanco, quien indicó que la planta productiva debe mantenerse y al contar con estos recursos, que en los últimos años se pagan cada vez a un plazo mayor, poder cumplir con sus obligaciones laborales y con ello definir la continuidad de las empresas.
Dijo también que el empresariado nacional, sobre todo el que se ha convertido en proveedores del sector, debe prepararse para ampliar su presencia en el proceso de integración del sector.
En este punto señaló que junto con las medidas preventivas que se realizan en materia de salud, es necesario que el gobierno federal integre otras dirigidas a facilitar que los empresarios nacionales se conviertan en proveedores de la maquila.
En este punto habló de dos aspectos: uno el facilitar al industrial con estímulos y otro, que incremente su producción de acuerdo con las necesidades de sus clientes.
El otro que se establezca por Ley la obligación para que las empresas que trabajan bajo el régimen de Industria Maquiladora, Manufacturera de Exportación (IMMEX) compren un porcentaje determinado de materias primas e insumos a empresas mexicanas.
Aclaró que no se trata de comprar por hacerlo simplemente, sino que los mismos empresarios cumplan con las especificaciones exigidas por quienes se van a convertir en sus clientes.
Dijo que este es el momento de hacerlo, si se toman en cuenta los problemas que han enfrentado las empresas para traer sus materias primas e insumos desde China, que en este momento es la principal causa de los paros técnicos implementados en algunas compañías.
Dijo que se hubiera querido ver más apoyo de parte del gobierno federal, pero el más grande que puede tener una industria debe ser a largo plazo, para que haya más ambiente propicio de negocios llegado el momento.
Esto lograría que bajo esta situación de emergencia el gobierno federal implemente un porcentaje mínimo de compras en México, lo que sería un beneficio permanente, lo que vendría a ser un detonante importante de la proveeduría.
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