Con la finalidad de contribuir a mitigar los efectos adversos del cambio climático, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), realiza prácticas ganaderas experimentales que ayudarían a capturar y almacenar el carbono.
Lo anterior lo comentó Pedro Jurado Guerra, investigador del campo experimental Inifap de La Campana, quien participó en el Foro regional de alternativas para enfrentar el cambio climático en la producción de alimentos, celebrado este jueves y viernes en la Facultad de Ciencias Agrícolas y Forestales (FCAyF).
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El investigador comentó que se realizan algunos proyectos sobre la implementación de buenas prácticas de manejo de ganado, encaminadas a la captura y almacenamiento del carbono, que es un gas de efecto invernadero y uno de los causantes del calentamiento global.
Señaló que en Chihuahua, con la ganadería de carne, se tiene un potencial grande para reducir el carbono de la atmósfera y aminorar los efectos del cambio climático. En el estado, pueden implementarse algunos sistemas de pastoreo rotacionales, que pueden permitir la captura y almacenamiento de los gases de efecto invernadero.
“Aquí la idea es que ese carbono que tenemos en el aire, en la atmósfera, por medio del manejo del ganado y del manejo del pastizal, lo podemos capturar por medio de la fotosíntesis y las plantas lo depositan en sus raíces y esas raíces se van a descomponer, y se van a depositar como carbono en el suelo”, explicó.
También, afirmó que la práctica de pastoreo es bastante atractiva para los productores pecuarios, porque hay programas a nivel internacional que pagan por los bonos de carbono. Cada bono, explicó, equivale a una tonelada de dióxido de carbono, cuyo precio puede llegar hasta los treinta dólares por hectárea.
Sin embargo, el proceso de los programas de pago por bonos de carbono es un poco lento porque debe medirse el gas en los pastizales, pero a largo plazo puede traer beneficios económicos a los ganaderos del estado y del país, además de los beneficios para el medio ambiente, subrayó el entrevistado.
De hecho, resaltó Jurado, muchos de los ganaderos de Chihuahua han iniciado con las prácticas saludables de pastoreo rotacional en sus ranchos, que básicamente consisten en mover el ganado de un potrero a otro, para que las tierras de agostadero descansen y se recuperen.
No obstante, dijo que son pocos los productores que están dentro de los programas de bonos de carbono, por lo que se necesita impulsarlos más a nivel estado y en todo el país, para que los ganaderos obtengan más ingresos y tengan una mejor producción, por lo que es “un ganar, ganar”.
Publicado originalmente por El Heraldo de Chihuahua
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