Sin mantenimiento se encuentran los cerca de 200 pozos oficiales concesionados por la Comisión Nacional del Agua a los módulos del Distrito de Riego 005, que no tienen los recursos suficientes para llevar a cabo las reparaciones y cuidados que se necesitan, señaló Víctor Reyes Cueto, vocero de la Asociación Civil de Usuarios.
Reyes Cueto comentó que los pozos son operados al máximo durante la temporada de otoño- invierno, cuando las presas La Boquilla y Francisco I. Madero permanecen cerradas a la extracción, pero pocas veces se les da cuidado o reparación si se averían.
“Tenemos un gran problema con pozos oficiales, que están registrados en CONAGUA pero están concesionados a los módulos de riego… esos pozos los operan al máximo los módulos de riego, pero sobre todo cuando ya no hay agua de las presas, a partir de septiembre, de octubre en adelante; los operan al máximo y lo único que necesitan, composturas o reparaciones, y esos pozos en su tiempo no se les da”, señaló.
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Víctor Reyes mencionó que cuando se presenta alguna falla en los pozos, los usuarios del distrito no tienen solvencia económica para llevar a cabo la reparación, pues el costo es elevado, por lo cual tienen que esperar mucho tiempo hasta que la Federación o el Gobierno del Estado destinen recursos.
Aunque el mantenimiento y arreglo de los pozos es responsabilidad de la CONAGUA, los módulos de riego no tienen la precaución de trabajar de una forma ordenada para prevenir los desperfectos, señaló el entrevistado.
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“Los explotan al máximo y ya cuando funcionan es cuando (los agricultores) piden apoyos a las dependencias, y esos recursos no se están aprovechando”, reafirmó el vocero de la asociación civil.
Estimó que en el Distrito de Riego 005 existen alrededor de 200 pozos oficiales, además de los perforados por particulares en sus predios agrícolas.
Respecto a estos últimos, comentó que los propietarios generalmente los ponen a funcionar cuando se retrasa la dotación de agua rodada proveniente de las presas, al igual que en los meses de otoño e invierno.
Asimismo, en la región existen cárcamos de bombeo en drenes y tajos, los cuales, junto los pozos oficiales y particulares, permiten irrigar una superficie equivalente al 30 por ciento del Distrito de Riego, es decir, 31 mil hectáreas, afirmó Víctor Reyes.
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