DELICIAS.- De un 50 a un 70 por ciento se redujeron las ventas para los comerciantes del Centro de la ciudad debido al “súper cierre” del fin de semana, medida que los propietarios de varios negocios consideraron inútil para frenar los contagios de Covid-19, y que en cambio sólo genera daños a la economía local.
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Comerciantes de distintos giros coincidieron en que los días sábado y domingo son cuando tienen las mayores ventas, por lo que obligarlos a mantener cerradas sus tiendas los privó de un ingreso importante.
Martina Noriega, locataria del Mercado Juárez, fue una de las comerciantes que resintió los efectos del “súper cierre”. Su negocio de cintos, sombreros, camisas, pantalones vaqueros y semillas no marchaba bien antes de las nuevas restricciones, pero este fin de semana pasado perdió el 70 por ciento de sus ventas.
Señaló que el sábado y el domingo son los “días buenos” para su tienda, porque es cuando la gente trae dinero, por lo que juzgó es un desacierto obligarla a cerrar el negocio, mencionando que los cobros de luz y derecho de piso no dejan de llegar.
América, quien es encargada de un puesto de elotes y frituras en la Calle 3ª Norte, fue otra de las muchas personas afectadas, pues no le pagaron los 500 pesos que normalmente gana de comisión por la venta de las botanas.
La joven calculó que la mitad de la mercancía se quedó sin vender, afirmando que el coronavirus no dejará de propagarse aunque suspendan el comercio, porque tarde o temprano todo el centro volverá a llenarse de personas.
De la misma forma opinó Gerardo Chávez Saldaña, vocero de la Unión de Comerciantes del Centro, quien señaló que suspender las actividades en fin de semana carece de sustento lógico, ya que incluso esto provoca que la gente se aglomere más entre semana.
“Al restringir lógicamente los días en los que la gente puede realizar sus compras, pues hace que lógicamente se aglomeren en los días que sí se puede, y lo que sí es que sí hay ventas para el comercio que se pierden definitivamente”, argumentó.
Gerardo Chávez expuso que se perdió el equivalente a un día de trabajo e ingresos, y recordó que los comerciantes han insistido mucho a las autoridades en buscar otras medidas que no dañen a la economía, pero lamentó que el gobierno esté más enfocado en obtener resultados positivos sin pensar en las consecuencias.
Por su parte Roberto González, conocido comerciante de ropa, propuso que para combatir efectivamente el Covid-19 en Delicias, debería conformarse una brigada de 300 personas armadas con pruebas que visiten a los familiares de todos los enfermos, para detectar si están contagiados y aislarlos, con lo cual se lograría detener la propagación del virus.
Aseguró que la mayoría de los contagios no ocurren dentro de los establecimientos comerciales ni en espacios exteriores, pues refirió que de acuerdo con un estudio realizado en China, el 99.5 por ciento suceden en las casas y otros lugares cerrados donde se tienen eventos como fiestas.
“No alcanza el tiempo de convivencia en un negocio para que haya contagios. Entonces lo triste es que se está tratando de combatir la epidemia con herramientas como cerrar negocios, que no son las herramientas adecuadas; entonces tenemos un problema doble: el problema de que van a seguir los contagios y el problema de que se van a morir los negocios”, vaticinó.
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