La candente temperatura ambiental es factor para que la ciudadanía haga caso omiso de utilizar cubrebocas cuando ande fuera de casa, aseguran personas consultada al exterior de una tienda de conveniencia que no utilizaban este insumo.
“Con el termómetro en 39 grados a la sombra y entre 41 y 43 grados al exponerse al sol, quién se va a poner cubrebocas, siente uno que se ahoga”, dijo Hilda Talamantes al salir de un negocio donde tampoco le exigieron utilizar este insumo.
De acuerdo a Protección Civil, el termómetro durante toda la mañana el lunes marcó entre 38 y 39 grados a la intemperie, pero a la sombra, aunque la sensación térmica, llegó hasta 43 grados centígrados en exposición directa al sol.
Jorge Rivera, titular de la dependencia, indicó que a pesar del excesivo calor con alto grado de humedad, provocada por mínimas y esporádicas lloviznas en torno a Ciudad Ahumada, generan mucho bochorno con excesiva humedad.
Pese al intenso calor, Protección Civil no ha tenido que intervenir ante posibles casos de insolación o deshidratación, peo hay que advertir que si se permanece por tiempo prolongado a los rayos solares y sin la debidas medidas de protección , la consecuencias pueden ser graves.
Reconoció que así como la señora que no utiliza cubrebocas porque siente que se asfixia, de la misma manera, responden trabajadores al aire libre, cuando se les recomienda hacer caso de medidas preventivas.
Informó que los pronósticos no favorecen la presencia e luvias, en cambio, sí nublados temporales, similares a cuando despunta el alba, pero a partir de las 8 de la mañana en promedio, la temperatura es ya insoportable, sin otras medidas de seguridad y protección, como el uso de sombrero, cachucha, bloqueador, ropas de colores claros y la ingesta frecuente de líquido, preferentemente agua natural.
En cuanto al uso de cubrebocas, precisó que no se puede exigir el uso porque no se permiten medidas coercitivas.
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