La ley que pretende aplicar el gobierno de Texas para expulsar a los inmigrantes que se encuentren en el estado norteamericano, es muy regresiva y puede afectar fuertemente la economía de Texas, consideró el presidente municipal, Cruz Pérez Cuéllar.
Expuso que en el estado de Florida ya lo hicieron en su momento, pero tuvieron que dar marcha atrás, ya que criminalizar la migración no es el camino, menos para un estado como Texas que se ha nutrido siempre de muchos migrantes.
El gobernador de Texas, Greg Abbott firmó un paquete de leyes antiinmigrantes, incluyendo la SB4, una de las más estrictas en la historia estadounidense y que otorga a la policía la facultad de detener y deportar migrantes sin el debido proceso.
El alcalde Pérez Cuéllar expuso que es una decisión soberana de otro país, no obstante, esta decisión tendrá consecuencias y sin duda afectará su economía.
“No descarto que en un próximo tiempo estemos viendo el mismo Greg Abbott dar marcha atrás”, dijo el mandatario de Ciudad Juárez.
Señaló que en esta frontera seguramente seguirá el mismo tráfico de migrantes y probablemente pueda disminuir un poco el tráfico por el temor que pueda generar.
Externó que la migración es un tema humano desde su creación y el tema de migración no parará en todo el mundo.
La ley permite a la justicia estatal ordenar la expulsión de personas sin mediar proceso judicial. Y lo más polémico, los oficiales de policía podrán arrestar a cualquier individuo del que sospechen que ingresó ilegalmente al país, y tendrán la facultad discrecional de expulsarlo a México.