Este quinto domingo de Pascua la primera lectura, Pablo y Bernabé, reúnen a la Iglesia que los envió a la misión para darles las novedades, y les cuentan lo que Dios había hecho por medio de ellos, “cómo había abierto a los gentiles la puerta de la fe”.
Dentro del tema el padre Jesús Ramírez, párroco de la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe, resaltó la importancia de no perder la paz, la fe y la alegría por la resurrección de Cristo.
“No pierdan la paz; nos referimos como a través del tiempo van pasando los días, las semanas y se va apagando la alegría de la Pascua, el saber que Cristo ha resucitado, él está vivo y que hay promesas por cumplir, entonces que aparezca diciendo no pierdan la paz, es una luz de esperanza”, dijo el padre.
Los fieles católicos deben mantener la mirada en él, para no aceptar las tentaciones que actualmente se están ofreciendo disfrazadas y sobre todo para nuestros niños y adolescentes que les resulta tentador en la forma que les ofrecen los distintos rumbos.
“Él incluso se presenta como yo soy el camino la verdad y la vida, de que no perdamos muestra mirada, siempre estar en el en medio de tantos caminos que se nos ofrecen para seguir y muchos son equivocados y tanta gente que se está perdiendo, nuestros jóvenes y nuestros niños, que llegue y nos diga esto debe llenar nuestros corazones de esperanza” resaltó el párroco.
Continúa hablando, el libro de los Hechos de los Apóstoles, sobre la pareja de misioneros, Pablo y Bernabé, en el primer viaje, relata como de regreso a Antioquía visitando y animando a las comunidades recién fundadas.
En todas estas ciudades establecieron responsables “designaban presbíteros” y destacaban como novedad que la Buena Noticia, el Evangelio, ha pasado del ámbito judío a ámbito de los paganos.
“¿Debemos alentarnos en medio de tanto miedo, ya que él nos dice no teman, crean y como alimentamos la fe? En la primera lectura se dan cuenta los apóstoles que era tanta la actividad que se amontonaba la gente y se dieron cuenta que no es bueno que perdieran el servicio a la palabra, eso debe ser el centro de todo cristiano”, finalizó Ramírez.