Los migrantes que recibirán en el albergue temporal serán aquellos que vengan con familias y hayan sido canalizados a través del Instituto Nacional de Migración (INM) o el Grupo Beta, indicó el director de Derechos Humanos del Municipio, Santiago González Reyes.
Además, que hayan sido canalizados del río Bravo, del punto de revisión Precos, aeropuerto o del tren.
A pesar de que aún faltan detalles, el albergue temporal ya está en posibilidades de recibir a personas en situación de movilidad que vengan en familia.
En el lugar hay tres carpas o áreas para separar por grupos a las familias migrantes que se encuentren.
Un área sería monoparentales de mujeres con hijos pequeños, la segunda área sería para familias completas con hijos pequeños y una tercera área para familias monoparentales
Las instalaciones cuentan con dormitorios, servicios sanitarios con agua caliente y se proporcionará alimentación por parte del INM, entidad encargada de aportar los recursos para la operación del campamento.
"El objetivo es que los migrantes lleven a cabo su proceso de manera ordenada. Se les dará apoyo para agendar su cita a través de la aplicación CBP One, y si después de una semana y media no han logrado avanzar en su proceso, se les ofrecerá ser canalizados hacia un albergue en la ciudad", explicó González Reyes.
Para mantener un control de acceso se implementarán pulseras de identificación, con el propósito de prevenir la entrada de personas ajenas al campamento. No obstante, se permitirá a los residentes salir libremente hasta las 11:00 de la noche.
Adicionalmente se contará con la vigilancia activa de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, así como con la presencia de personal de Protección Civil para garantizar la seguridad y el bienestar de los ocupantes.
El albergue temporal se ubica en la intersección de las calles David Herrera Jordán y Moctezuma, tiene una capacidad para albergar a 300 personas y estará bajo la administración de la Dirección de Derechos Humanos del municipio.
