La crisis migrante que orilla a cientos de personas a llegar hasta Ciudad Juárez para lograr el sueño americano, continúa afectando a menores de edad, quienes ya sea solos o acompañados son rescatados por autoridades locales de las manos de polleros que también los tienen secuestrados dentro de viviendas.
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Por ejemplo, el fin de semana se recataron a 11 menores que estaban en un hotel de la colonia La Cuesta y fueron trasladados a la Subprocuraduría Auxiliar de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, para su resguardo y seguridad.
Rogelio Pinal, titular de la dirección de Derechos Humanos del Municipio, explicó a El Heraldo de Juárez, que los niños migrantes continúan llegando solos a Ciudad Juárez, debido a que en su mayoría sus padres o tutores ya están en los Estados Unidos y pagan desde allá a polleros para su traslado al vecino país.
Al llegar solos a esta frontera y ser rescatados por las autoridades, no pueden quedarse en los albergues migrantes, por lo cual pasan a la Subprocuraduría Auxiliar de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, quienes a su vez buscan cómo reintegrarlos con su familia o lugar de origen.
“Son menores no acompañados, no vienen acompañados por un familiar directo, en ese caso el protocolo que se sigue por parte de las autoridades es ponerlos inmediatamente en manos de Trabajo Social de Seguridad Pública y ellos a su vez a la Subprocuraduría de Protección al menor. Nosotros no podemos aceptarlos, tenemos ese protocolo de no aceptar a menores no acompañados”, refirió Pinal.
Explicó que en el gimnasio Kiki Romero, solo están menores que están acompañados por sus padres, ya que tiene que ser un familiar directo con quien vengan para poder estar dentro de los albergues.
“Nosotros no podemos ingresar a un menor que no venga acompañado por un familiar directo, en este caso puede ser papá, mamá, hermanos o tíos”, comentó.
Ante esto, refirió que los rescatados o quienes llegan solos hasta Ciudad Juárez, vienen guiados por un pollero, quien les asegura el cruce al vecino país.
“Los menores por lo regular, los parientes directos ya están en Estados Unidos y le pagan a los polleros para que se los traigan, por eso no vienen con familiares, vienen guiados por el pollero que es el que los va a llevar a los Estados Unidos. Los asegura seguridad Pública (niños migrantes) y los polleros los dejan a la deriva”, añadió.
Explicó que esta situación sí es común en Ciudad Juárez, ya que las bandas de polleros o coyotes, únicamente están interesados en la cuestión económica, es decir lo que pueden pagar las familias para cruzar a los menores y no la integridad de estos.
“Si ponen un menor lo llevan, si ponen lo que sea lo cruzan, es un ganar y ganar para ellos”, expresó.
A su vez, aseguró que continúan llegando familias a la ciudad que buscan cruzar a los Estados Unidos.
Por ejemplo, ayer había más de 300 personas en el gimnasio municipal Kiki Romero, de las cuales más del 70 por ciento son familias que tren consigo menores de edad.
La mayoría son originarios de Michoacan y extranjeros.
“En la mañana amanecimos con 308 personas, de esas el 60 o 70 por ciento son de origen michoacano y los demás extranjeros. La mayoría vienen en núcleos familiares, casi el area de núcleos familiares está saturada, probablemente no se acepten hombres solos para darle preferencia a los que son más vulnerables que son las familias”, mencionó.
Pinal aseguró que la mayoría de las personas que están en el albergue Kiki Romero son personas que recién llegan a la ciudad o son trasladados por las autoridades.
En el caso de los que son rescatados por las autoridades de las casas de seguridad de polleros, el titular de Derechos Humanos explicó que al menos el 90 por ciento decide irse del lugar, en cuanto los agentes de la SSPM abandonan el albergue.
“La mayoría de los rescatados, si no es que el 97 por ciento inmediatamente de que se van las unidades de Seguridad Pública ellos deciden irse. A veces si da un poco de coraje porque les hacemos la prueba del Covid y todo y se retiran y echamos a perder muchas pruebas de Covid de personas que se van a quedar en el lugar”, añadió.
A la par de esta situación, actualmente hay reporte oficial de al menos 3 menores desaparecidas, ya que se escaparon de los albergues migrantes en donde habitaban.
De acuerdo con los reportes oficiales las primeras dos jóvenes en desaparecer estaban en la Casa YMCA en la colonia Chaveña. Una lleva por nombre Maricela Tol Tzoc de 15 años y la otra Juana Alicia Tol Tzco de 17 años.
Hasta ayer no había información de que habían sido localizadas.
