Santiago González, director del albergue municipal, Kiki Romero, comentó que con ello se ha buscado que este refugio sea un espacio de derechos humanos, no sólo de acogida y estancia. “Buscamos que las personas tengan un desarrollo personal y humano”, dijo.
La biblioteca lleva por nombre “Filiberto Terrazas”, abogado, escritor y cronista que nació en el municipio de Cuauhtémoc, Chihuahua y quien acaba de fallecer. “Fue un migrante interno, y que le entregó mucho a esta frontera”, expresó.
González, mencionó que durante el primer día, se pudo observar el interés de los migrantes hacia la lectura, ya que muchos de ellos son profesionistas.
Asimismo, señaló que hubieron migrantes que apoyaron con la adaptación de esta biblioteca, como fue el caso de un migrante ingeniero mecánico, quien ayudó con los cálculos en tema de física para poder realizar los soportes necesario para que los estantes no cayeran.
Esta biblioteca cuenta con un acervo de 7 mil libros, de los cuales el 70 por ciento fue donado gracias a los ciudadanos juarenses, el otro 30 por ciento lo donaron diversas instituciones.
“Vamos a continuar recibiendo donaciones, queremos ampliar nuestro acervo, nosotros concluimos nuestra solicitud de incorporación a la Red de Biblioteca, sin embargo aún está en proceso”, dijo.
Se estima que ocho mil personas por año tendrán acceso a la biblioteca, superando el promedio de una biblioteca pública de similares dimensiones.