Este fin de semana por medio de una misa, varios de los niños en situación de movilidad que están temporalmente en la Casa del Migrante, recibieron los sacramentos para la iniciación de la vida cristiana.
“El día sábado estuve en la Casa del Migrante y bauticé a cinco niños, confirme a otros cinco y ocho hicieron su primera comunión", detalló el Obispo de la Diócesis Mexicana de Ciudad Juárez, José Guadalupe Torres Campos.
“Fue una muy bonita experiencia, en medio de dolor y tristeza, llegan cansados, en espera de un tiempo para la oportunidad de cruzar a Estados Unidos, en medios de esa situación, sus sacramentos”, resaltó la máxima autoridad eclesiástica en la ciudad.
“Se prepararon, se bautizaron, los confirmé, su primera comunión, esto es acompañar a los migrantes, no solo la alimentación, también la parte jurídica y la parte espiritual, fue una convivencia muy fraterna” relató Torres Campos.
Es difícil para las personas en situación de movilidad el llevar los cursos para que sus hijos o incluso de adultos, se reciban los sacramentos, ya que no portan documentos para poder hacer los registros ante la iglesia.
“Sí, es difícil, efectivamente se tienen dificultades para los trámites, para el papeleo pero el padre y su equipo hacen un gran esfuerzo por medio de llamadas de donde provienen y vamos investigando en medida de los posible y cuando se agotan y no tenemos datos, se hacen juramentos y se les ayuda en los más posible”, enfatizó el obispo.
Sin hacernos saber las nacionalidades de los pequeños y jovencitos, se nos dijo que también están connacionales dentro de estas actividades que se realizan dentro de la Casa del Migrante.
Finalmente, tras la celebración eucarística se realizó un convivio con todos los participantes, para lograr una mejor convivencia entre los migrantes y los mexicanos que se encuentran refugiados mientras logran cruzar a la Unión Americana.