Ciudad Juárez, Chihuahua.-. "Ella me dijo, mamá mañana vengo y aun no llega, hasta ahorita la sigo esperando", está fue la última plática que tuvo la señora Silvia Banda con su hija Fabiola Janeth Valenzuela Banda, tras su desaparición en el 2010.
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Ahora, la afligida madre conmemora su recuerdo y en el Día Internacional de la Mujer salió de nueva cuenta a las calles para pedir justicia por el asesinato de Fabiola, cuyos restos le fueron entregados en el 2012, sin que, hasta el momento, exista algún detenido.
Según narra, su hija estuvo en el afamado Hotel Verde, donde la tenían prostituyéndose, de hecho, existe un video que estaba en manos de un agente federal, donde se ve a Fabiola Janeth en ese lugar y un cuaderno con el nombre de ella y su apodo, “La Cherry´s”.
Sin embargo, el caso está lleno de contradicciones e irregularidades, ya que en un principio le habían dicho que los restos de ella fueron localizados en un predio del kilómetro 29 de la carretera a casas grandes, junto con el de dos hombres.
Los investigadores le dijeron que en el lugar solo se localizó un cráneo, pero no era el de su hija, sin embargo, las muestras de genética las extrajeron de ese cráneo, lo que la hace sospechar de la veracidad en las investigaciones.
Después, le informaron que no, que en ese lugar había los restos de dos mujeres, para finalmente, enterarse que el nombre de su hija se mencionó en la audiencia por el caso del Arroyo del Navajo, en el Valle de Juárez.
“Yo no sé qué enterré el día que me la entregaron, no me dejaron abrir el ataúd porque me dijeron que no había nada que reconocer, entonces, ¿qué enterré, que fue lo que llevé al panteón?”, dijo con lágrimas en los ojos.
Por eso durante los últimos años ha insistido en que se le permita exhumar el cuerpo y realizarle otros estudios, con un equipo de antropólogos del extranjero, pero la Fiscalía Especializada de la Mujer no se los ha permitido.
Recalcó que, aunque para muchas es un día de festejo, para ella, el 8 de marzo es un día de andar, un día de recordar a su hija y de seguir en la lucha, siendo un día de luto, un 23 de agosto que para la señora Silvia no termina y no amanece.
“Mi caso esta como parado, yo sé que si voy me van a decir que tienen puras líneas de investigación, donde se supone que debe de haber, pero lo que les he pedido es la exhumación”, recalcó una y otra vez.
Recuerda que ella desapareció a finales del 2010, para el 2011 le tomaron muestras de ADN a ella y a su nieto, hijo de Fabiola y fue hasta el 2012 cuando le notificaron su hallazgo y le entregaron sus restos, aunque su cuerpo sin vida aparece un par de meses después de su desaparición.
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