/ jueves 14 de marzo de 2024

Cultura incluyente

El día 8 de marzo se nombró a una nueva directora del Instituto para la Cultura del Municipio de Juárez (Ipacult), recayendo en Myrna Judith Barajas Martínez, quien ya formaba parte del Consejo de Gobierno del propio Ipacult. Con esto se da solución a una situación irregular, ya que debió haberse designado a un titular desde el año 2023, luego de que ya habían pasado siete años desde el anterior nombramiento de un director. Sin embargo, recordemos que todavía falta la toma protesta a la nueva directora, dentro de una ceremonia especial, pero de momento se corrigió la ilegalidad.

Me tocó estar al pendiente del nombramiento de Barajas Martínez, a la cual en lo personal no conozco, pero a quien le deseo lo mejor. Sin embargo, también señalo que su designación se dio en medio una situación anómala, ya que un grupo de artistas e intelectuales se consideraban con merecimientos para participar dentro del Instituto en alguna consejería; pero finalmente el consejo hizo su designación.

Ojalá que el trabajo del Ipacult siga consolidándose apegado a la legalidad. Conozco a varios de los que se promovieron para el organismo en calidad de participantes en el consejo, en espacial a la actriz, dramaturga y directora teatral Perla de la Rosa, quien ha obtenido premios muy importantes, como el otorgado por el Congreso del Estado de Chihuahua y que constituye una de las máximas distinciones para cualquier ciudadano. Ante esto, lamento que no se le haya tomado en cuenta para el consejo. Si bien es cierto que hay diferentes visiones en cuanto al manejo de los programas culturales del municipio, desde mi punto de vista sí debió ser incluida, pese a tener una versión de las cosas distinta a otros enfoques.

De la Rosa asistió al evento de designación de la nueva directora e impugnó el proceso, lo cual me parece legítimo, pues nuestro gobierno municipal debe escuchar a la ciudadanía y sobre todo a una persona con estas características de trabajadora cultural, y por ser una de las chihuahuenses más destacadas. Pero en fin, el Consejo de Gobierno del Ipacutl eligió a Barajas Martínez.

De cualquier manera, me da gusto que los ciudadanos estén vigilantes con la toma de decisiones del municipio; muy legitimas sus demandas. Porque no solo es ella, sino el grupo de personas quienes tienen como antecedentes haber impedido que se derrumbara la Sala de Espectáculos del Instituto Nacional de Bellas Artes, durante lucha ciudadana que se libró en la década de los noventa en Ciudad Juárez.

Espero que la nueva presidenta tome las mejores decisiones; realmente le deseo mucho éxito. Y a las personas que no lograron sus objetivos de participación, les digo que no desistan de sus propósitos, porque son gente sumamente valiosa. Sin embargo hay que intensificar el diálogo, entre todas las partes, es por el bien de la comunidad juarense, porque merecemos un instituto de cultura para todos y todas.

El día 8 de marzo se nombró a una nueva directora del Instituto para la Cultura del Municipio de Juárez (Ipacult), recayendo en Myrna Judith Barajas Martínez, quien ya formaba parte del Consejo de Gobierno del propio Ipacult. Con esto se da solución a una situación irregular, ya que debió haberse designado a un titular desde el año 2023, luego de que ya habían pasado siete años desde el anterior nombramiento de un director. Sin embargo, recordemos que todavía falta la toma protesta a la nueva directora, dentro de una ceremonia especial, pero de momento se corrigió la ilegalidad.

Me tocó estar al pendiente del nombramiento de Barajas Martínez, a la cual en lo personal no conozco, pero a quien le deseo lo mejor. Sin embargo, también señalo que su designación se dio en medio una situación anómala, ya que un grupo de artistas e intelectuales se consideraban con merecimientos para participar dentro del Instituto en alguna consejería; pero finalmente el consejo hizo su designación.

Ojalá que el trabajo del Ipacult siga consolidándose apegado a la legalidad. Conozco a varios de los que se promovieron para el organismo en calidad de participantes en el consejo, en espacial a la actriz, dramaturga y directora teatral Perla de la Rosa, quien ha obtenido premios muy importantes, como el otorgado por el Congreso del Estado de Chihuahua y que constituye una de las máximas distinciones para cualquier ciudadano. Ante esto, lamento que no se le haya tomado en cuenta para el consejo. Si bien es cierto que hay diferentes visiones en cuanto al manejo de los programas culturales del municipio, desde mi punto de vista sí debió ser incluida, pese a tener una versión de las cosas distinta a otros enfoques.

De la Rosa asistió al evento de designación de la nueva directora e impugnó el proceso, lo cual me parece legítimo, pues nuestro gobierno municipal debe escuchar a la ciudadanía y sobre todo a una persona con estas características de trabajadora cultural, y por ser una de las chihuahuenses más destacadas. Pero en fin, el Consejo de Gobierno del Ipacutl eligió a Barajas Martínez.

De cualquier manera, me da gusto que los ciudadanos estén vigilantes con la toma de decisiones del municipio; muy legitimas sus demandas. Porque no solo es ella, sino el grupo de personas quienes tienen como antecedentes haber impedido que se derrumbara la Sala de Espectáculos del Instituto Nacional de Bellas Artes, durante lucha ciudadana que se libró en la década de los noventa en Ciudad Juárez.

Espero que la nueva presidenta tome las mejores decisiones; realmente le deseo mucho éxito. Y a las personas que no lograron sus objetivos de participación, les digo que no desistan de sus propósitos, porque son gente sumamente valiosa. Sin embargo hay que intensificar el diálogo, entre todas las partes, es por el bien de la comunidad juarense, porque merecemos un instituto de cultura para todos y todas.