Hace unos días, fue propuesta por nuestro Presidente Andrés Manuel López Obrador, la Reforma política electoral. Esta iniciativa fue enviada al Congreso de la Unión, para su análisis y aprobación.
Entre los puntos medulares de esta iniciativa destacan, la disminución de 500 a 300 diputados. Al igual que de 128 a 96 senadores.
Esta reducción, no afectara la calidad de representación, la mejoraría. Se eliminan los diputados por los que ni usted, ni yo votamos, ellos fueron escogidos por los partidos políticos. Tal medida es un clamor, de varios años por el pueblo de México.
Es importante mencionar que México, tiene más legisladores que el 71% de los países del mundo y que el 100% de los países de Latinoamérica. Incluso son más que Brasil, aún si este país es 65% más poblado.
Un punto interesante, es que México ha privilegiado la cantidad de legisladores sobre la calidad y ello podría cambiar si se redujeran los plurinominales. Veremos mejores resultados legislativos, con menos inversión.
Otro aspecto a destacar de esta reforma, que se modifique el número de consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), de 11 a 7; los cuales serán elegidos por los mexicanos. Además, se busca la desaparición de los Organismos Públicos Locales del INE. A lo largo de la historia, se ha demostrado que la mayoría de los conflictos electorales, son solucionados con este organismo a nivel nacional.
Anualmente, se incrementa el dinero público que se destina al periodo de elecciones. Por ejemplo, en 1999 se asignó un presupuesto de 13,400 millones de pesos, mientras que para 2018 el presupuesto fue de 23,998,551.1 miles de pesos. Tenemos el instituto comparado con la cantidad de habitantes, el más caro del mundo.
También se plantea la posibilidad del voto electrónico, se busca aprovechar las tecnologías de la información y comunicación con el objetivo de facilitar la participación ciudadana en los comicios electorales.
México tiene la capacidad tecnológica y legal suficiente para recibir votos de manera digital, así se ha demostrado en entidades como Coahuila, Ciudad de México, Estado de México y Jalisco, que iniciaron de plan piloto con esta práctica.
Igualmente, se pretende una reducción en la cantidad que se entrega a los partidos políticos. En la actualidad nuestro país destina alrededor de once mil millones de pesos en subsidios públicos a las actividades ordinarias de los partidos políticos de cada año. El que se destinen estos recursos, es algo que indigna al pueblo de México, ya que pueden ser dirigidos a cubrir las necesidades de aquellos en situación vulnerable.
Mediante estas acciones, nuestro Presidente Andrés Manuel López Obrador, demuestra su compromiso con el pueblo de México. Con estas modificaciones, se ahorrarían más de 24 mil millones de pesos. Recursos que se pueden destinar, para cubrir las necesidades más apremiantes en beneficio de los que menos tienen.
