/ lunes 30 de marzo de 2020

Quédate en casa

Quédate en tu casa es el grito de desesperación de las autoridades de salud del país. De un exhorto que parecía no tener autoridad en semanas pasadas, hoy se convierte en una orden en la que los ciudadanos nos tenemos que poner los pantalones y ejercer presión para proteger a la población.

El COVID 19 ha trastocado el orden de las cosas. Es “impostergable”, la orden es quedarse en casa y hacerlo en forma masiva. La medida es para evitar la velocidad de contagio y que los hospitales puedan atender los casos que se presenten. Son medidas que con una anticipación de semanas ya habíamos comentado. Cada una de las fases las vamos a tener, tenemos que prepararnos para sin ser fatalistas, tener la oportunidad de evitar al máximo el contagio.

Lo más seguro que hay es que nos vamos a enfermar de ese virus (es una nueva gripe), tenemos que prepararnos en la forma de que podamos salir adelante, salud mental, salud física y sobretodo atender las recomendaciones de los médicos.

El estar en casa tiene su lado positivo, vas a asegurar la salud tuya y de los tuyos. Tu familia y tu estarán menos propensos a infectarse y de esa manera podrás contribuir a su salud. Una de las recomendaciones que más han dado las autoridades son la limpieza, empezar por ello. Si no recibes visitas mejor. Sin pena, pero es momento de no jugar con la vida. A lavarse las manos intensamente.

Utiliza el tiempo en casa para descansar. Puedes tener una larga jornada laboral y nunca has tenido vacaciones, pues es momento de hacerlo. No cocine de más, sólo lo necesario, lleva un control de la alimentación que te permita cuidar una dieta balanceado con todos los grupos nutricionales.

Lleva una agenda de actividades. Un día dedícalo, dentro de la agenda, para arreglar la alacena, otro para la cocina, una más para el closet, los libreros, la recamara, los baños, así, cada una parte de la casa. La limpieza de esta área ayudará en lo saludable, pero también te mantendrá ocupado.

También sería conveniente dedicar un tiempo para leer un libro, ordenar la computadora, empezar a escribir un resumen, transcribir las notas importantes de tu cuaderno a la computadora. Escoge un lugar para leer, ponte de meta un capítulo diario, un mínimo de diez páginas o un tiempo de media hora para la lectura. En ese sentido, formarás un hábito y te va ayudar en tu vida personal.

Escribir un diario. Recuerda que esta contingencia va para largo, es momento de escribir nuestras ideas. Escríbele a la persona que añoras una carta, recuerda que ya no mandamos cartas por correo ordinario, así que prepárala para entregarla personalmente o bien, guárdala para el momento oportuno.

También sabemos que las tecnologías están a nuestro alcance, si es bueno que escojas una buena serie, dedícale un poco de tiempo, pero no todo. Busca entre tus cosas esa película en video que te hizo reír o llorar, repásala de nuevo. Es una oportunidad para darnos las cosas que nos gustan y esta es una manera fácil de hacerlo.

La cocina es el mejor lugar para pasar el tiempo, dedícale para hacer comida tradicional, algún platillo que necesite tiempo para preparar. Sírvelo con una presentación de fotografía y además acompáñalo con una bebida de frutas naturales. Recuerda que en esta contingencia es bueno reservarse de tomar bebidas con alcohol. También es conveniente bajar la ingesta de carnes rojas. Aprovecha e imagina un menú de semana santa, con comida de temporada. Son algunos consejos para que recuerdes que tienes que estar preparado y por supuesto quedarte en casa, no lo olvides.

Finalmente, dedícale un poco a tu vida espiritual. Orar, repasar las palabras del evangelio, ver una película sobre semana santa o que recuerde la pasión de Cristo nos acercará un poco más a Dios. En fin, las actividades en casa son muchas, así que quédate en casa… quédate en casa… quédate en casa.

Quédate en tu casa es el grito de desesperación de las autoridades de salud del país. De un exhorto que parecía no tener autoridad en semanas pasadas, hoy se convierte en una orden en la que los ciudadanos nos tenemos que poner los pantalones y ejercer presión para proteger a la población.

El COVID 19 ha trastocado el orden de las cosas. Es “impostergable”, la orden es quedarse en casa y hacerlo en forma masiva. La medida es para evitar la velocidad de contagio y que los hospitales puedan atender los casos que se presenten. Son medidas que con una anticipación de semanas ya habíamos comentado. Cada una de las fases las vamos a tener, tenemos que prepararnos para sin ser fatalistas, tener la oportunidad de evitar al máximo el contagio.

Lo más seguro que hay es que nos vamos a enfermar de ese virus (es una nueva gripe), tenemos que prepararnos en la forma de que podamos salir adelante, salud mental, salud física y sobretodo atender las recomendaciones de los médicos.

El estar en casa tiene su lado positivo, vas a asegurar la salud tuya y de los tuyos. Tu familia y tu estarán menos propensos a infectarse y de esa manera podrás contribuir a su salud. Una de las recomendaciones que más han dado las autoridades son la limpieza, empezar por ello. Si no recibes visitas mejor. Sin pena, pero es momento de no jugar con la vida. A lavarse las manos intensamente.

Utiliza el tiempo en casa para descansar. Puedes tener una larga jornada laboral y nunca has tenido vacaciones, pues es momento de hacerlo. No cocine de más, sólo lo necesario, lleva un control de la alimentación que te permita cuidar una dieta balanceado con todos los grupos nutricionales.

Lleva una agenda de actividades. Un día dedícalo, dentro de la agenda, para arreglar la alacena, otro para la cocina, una más para el closet, los libreros, la recamara, los baños, así, cada una parte de la casa. La limpieza de esta área ayudará en lo saludable, pero también te mantendrá ocupado.

También sería conveniente dedicar un tiempo para leer un libro, ordenar la computadora, empezar a escribir un resumen, transcribir las notas importantes de tu cuaderno a la computadora. Escoge un lugar para leer, ponte de meta un capítulo diario, un mínimo de diez páginas o un tiempo de media hora para la lectura. En ese sentido, formarás un hábito y te va ayudar en tu vida personal.

Escribir un diario. Recuerda que esta contingencia va para largo, es momento de escribir nuestras ideas. Escríbele a la persona que añoras una carta, recuerda que ya no mandamos cartas por correo ordinario, así que prepárala para entregarla personalmente o bien, guárdala para el momento oportuno.

También sabemos que las tecnologías están a nuestro alcance, si es bueno que escojas una buena serie, dedícale un poco de tiempo, pero no todo. Busca entre tus cosas esa película en video que te hizo reír o llorar, repásala de nuevo. Es una oportunidad para darnos las cosas que nos gustan y esta es una manera fácil de hacerlo.

La cocina es el mejor lugar para pasar el tiempo, dedícale para hacer comida tradicional, algún platillo que necesite tiempo para preparar. Sírvelo con una presentación de fotografía y además acompáñalo con una bebida de frutas naturales. Recuerda que en esta contingencia es bueno reservarse de tomar bebidas con alcohol. También es conveniente bajar la ingesta de carnes rojas. Aprovecha e imagina un menú de semana santa, con comida de temporada. Son algunos consejos para que recuerdes que tienes que estar preparado y por supuesto quedarte en casa, no lo olvides.

Finalmente, dedícale un poco a tu vida espiritual. Orar, repasar las palabras del evangelio, ver una película sobre semana santa o que recuerde la pasión de Cristo nos acercará un poco más a Dios. En fin, las actividades en casa son muchas, así que quédate en casa… quédate en casa… quédate en casa.